Un chico de 19 años ha estado a punto de morir por haberse comido un plato de fideos y pollo. Le han tenido que amputar las piernas y ha estado muy grave ingresado en la UCI de un hospital de Estados Unidos. Han analizado la comida y han descubierto que estaba contaminada por una bacteria.
Todo ha empezado cuando este joven se ha comido un plato de fideos y pollo que un amigo suyo había guardado, aproximadamente, unas 20 horas antes a la nevera. Lo que no imaginaba era lo que pasaría a continuación.
El chico de 19 años se empezó a encontrar mal
Empezaron a pasar las horas y se empezó a encontrar mal. Al principio tenía náuseas y ganas de vomitar, pero no le dio mucha importancia: pensaba que había comido algo que no había podido digerir bien y que en un rato le pasaría.
No obstante, las horas iban pasando y su estado de salud cada vez empeoraba más. De repente, le empezaron a salir unas manchas moradas muy extrañas a todo el cuerpo y estuvo entonces cuando decidió ir a Urgencias.
Ingresa en la UCI del hospital de Massachusetts muy grave
Cuando los médicos comprobaron la gravedad de la situación, el chico de 19 años ingresó en la UCI del hospital de Massachusetts: tenía un shock séptico, que es una afección muy grave que pasa cuando, por culpa de una infección, la presión arterial baja. Por si no fuera poco, varios órganos de su cuerpo le empezaron a fallar: estaba a punto de morir.
Se había infectado con una bacteria del plato de fideos y pollo
Le hicieron diferentes pruebas y análisis por saber qué había pasado, ya que era todo muy extraño. Gracias a estas analíticas, pudieron saber que se había infectado con una bacteria, que estaba en el plato de fideos y pollo que se había comido el día anterior. Su amigo también había comido el mismo plato de fideos, pero a diferencia del chico de 19 años, solo tuvo vómitos y náuseas, pero afortunadamente, su estado de salud no fue a peor.
Le tuvieron que amputar las piernas para salvarlo
La bacteria responsable de la terrible infección es la neisseria meningitidis que, en el peor de los casos, puede provocar la muerte. En el caso de este chico de 19 años, no lo mató, pero como la infección le llegó a las extremidades, los médicos le tuvieron que amputar las piernas para evitar que perdiera la vida. Este caso ha provocado que la New England Medical Journal haga un estudio para averiguar las circunstancias de este extraño fenómeno.