Los agentes del Grup de Recerca Activa de Fugitius (GRAF) de los Mossos d'Esquadra han detenido a un joven de 25 años que tenía vigente una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por haber hecho explotar dos cajeros automáticos el año 2022 en dos ciudades de Alemania, con el objetivo de llevarse el dinero que había dentro. El fugitivo, de origen magrebí, había escapado del país después de cometer los robos y se había escondido en Catalunya. Finalmente, el pasado 8 de junio, los Mossos d'Esquadra le pudieron identificar en un piso turístico de la localidad de Corbera de Llobregat (Baix Llobregat) donde le detuvieron. A estas alturas, se encuentra ingresado en la prisión a la espera de ser extraditado a Alemania.
Se atrincheró en un Airbnb
El pasado 8 de junio, después de que la policía catalana recibiera la información de que el fugitivo podía encontrarse en un domicilio de Corbera de Llobregat, una patrulla se dirigió hasta el lugar para hacer las comprobaciones pertinentes. Al llegar se dieron cuenta de que se trataba de un Airbnb que el sospechoso había alquilado con otras cinco personas más. Los inquilinos, al darse cuenta de la presencia de los Mossos, cerraron todas las puertas y las persianas y se negaron a salir. Ante esta situación, los agentes solicitaron refuerzos, entre ellos miembros del GRAF y del Grup Especial d'Intervenció (GEI), que rodearon el edificio.
El estatus violento del fugitivo hizo necesario acordonar el perímetro para evitar que las personas que estaban en los alrededores pudieran salir heridas en caso de producirse un posible tiroteo. Mientras los agentes intentaban ponerse en contacto con los seis hombres que se habían atrincherado en el piso turístico, desde comisaría estaban llevando a cabo las gestiones necesarias para que el juzgado de guardia de Sant Feliu de Llobregat emitiera una orden de entrada en el domicilio, que permitiría actuar en los agentes.
Finalmente, los seis hombres salieron voluntariamente y permitieron el acceso al piso para registrarlo. Cinco de los hombres atrincherados quedaron identificados por la policía catalana, mientras el sexto, el fugitivo en cuestión, fue detenido y trasladado a comisaría donde se formalizó el OEDE.