La policía de Viladecans ha detenido, después de una investigación de los Mossos d'Esquadra y en colaboración con varias policías de la zona costera del Baix Llobregat, a un ladrón que tiene más de 80 antecedentes y que los últimos días, después de escaparse de un centro terapéutico donde estaba cumpliendo una condena, había asaltado doce comercios de Gavà, Viladecans y Castelldefels reventando los escaparates. Según ha podido saber ElCaso.com, el hombre, vecino de Sant Boi, estaba ingresado en un centro de salud mental donde fue enviado por el juzgado que lo condenó en el último caso en que fue detenido, pero el día 4 de enero salió del centro después de recibir un permiso y ya no volvió más, aunque debía hacerlo.
Fue justo al día siguiente cuando comenzaron a registrarse robos en la zona del Baix Llobregat, y concretamente en otros municipios costeros. La Unidad de Investigación de los Mossos d'Esquadra de la comisaría de la comarca se puso en marcha para intentar localizar al autor o los autores de estos robos, que siempre eran con el mismo modus operandi: comercios con escaparates de cristal, que fuera fácil romperlos para acceder al interior. Entradas rápidas para ir directo a la caja registradora, llevarse lo que pudiera y, al mismo tiempo, llevarse también lo que pudiera recoger de lo que vendieran en la tienda o establecimiento asaltado. Entraba y salía con rapidez para evitar ser atrapado, pero los Mossos pudieron identificarlo. Había un hecho que estaba claro.
Escapó y comenzaron los asaltos en comercios
Desde que no había vuelto al centro donde estaba internado, se habían disparado los asaltos y las imágenes de las cámaras de seguridad permitieron identificarlo. Aunque los Mossos lo buscaron en los lugares donde creían que podría vivir, finalmente publicaron en las bases de datos policiales una orden de detención después de poder identificarlo completamente. Con la imagen -era fácil encontrarla, tiene 83 antecedentes, según ha podido saber ElCaso.com- también se difundió la orden de detención a todas las policías locales de la zona. Era importante localizarlo y detenerlo. El hombre, de nacionalidad española, fue identificado por una patrulla de policía de Viladecans la semana pasada y pudo ser detenido. Los investigadores de los Mossos le imputan doce asaltos idénticos en solo cinco días, desde que escapó del centro hasta que fue detenido.
Después de pasar una noche en la comisaría, fue enviado ante el juez. En esta ocasión, sin embargo, el magistrado no vio claro devolverlo al centro terapéutico donde había estado ingresado hasta ahora y decidió enviarlo a prisión, a Brians, donde ingresó el día 11 de enero, según han explicado fuentes de la investigación a ElCaso.com. Los robos en comercios, desde que fue arrestado, han bajado a casi cero. No era casualidad. De momento, durante un tiempo, ahora en la prisión, los comercios de la costa del Baix Llobregat podrán respirar.