Detienen a una de las fugitivas más buscadas de Hungría tras aterrizar en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas procedente de la República Dominicana. La mujer se había zafado del país de Europa del Este hacia el Caribe hacía 10 años, después de posibles condenas que exceden los 15 años de prisión por los presuntos delitos de falsedad documental, fraude y estafa. De hecho, ya fue condenada por la justicia húngara a una década entre rejas, pero mantenía las causas abiertas para ser juzgada. Sobre la mujer, antes de ser arrestada por la Policía Nacional en las pistas de Barajas, constaba una Orden Europea de Detención y Entrega interpuestas por las autoridades de su país de origen.

 

Investigación de los fugitivos más buscados de Europa a España

La Policía Nacional inició una investigación en el año 2022 para intentar encontrar en España a todos estos individuos que forman parte de la lista European Most Wanted, desarrollada por Europol y la red Enfast. En estos informes se encuentran los prófugos más importantes de los países europeos según varios factores como la gravedad de los delitos cometidos, el grado de peligrosidad o el riesgo de evasión de la justicia. En estas indagaciones, los agentes intentaron localizar a la mujer húngara huida, que estaba en la lista de más buscados en el país por uno hechos sucedidos entre 2005 y 2012. La fugitiva, que es especialista en relaciones bancarias y fraudes crediticios, en colaboración con otras dos personas consiguió hacerse ilegalmente con más de dos millones de euros y crearon sociedades fantasma.

Por todo esto, se pensó que se había trasladado a algún país fuera de Europa. La primera sospecha fue que podía estar en Tailandia, donde uno de sus colaboradores había sido detenido. No obstante, una vez la investigación estuvo más avanzada se confirmó, este enero, que la mujer estaba residiendo en la República Dominicana. Tras semanas de indagaciones e informaciones cruzadas entre las autoridades españolas, alemanas y dominicanas, consiguieron detectar su presencia en el país caribeño, donde vivía protegida por una influyente comunidad húngara. La prófuga había desarrollado una vida aparentemente familiar y normal bajo una identidad falsa y, además, se había casado con un hombre de nacionalidad dominicana, con quien tenía una hija pequeña.

Detenida en el aeropuerto de Madrid procedente de la República Dominicana

Finalmente, con toda esta documentación, las autoridades españolas y dominicanas establecieron un dispositivo conjunto para detenerla. Pero no fue en el país caribeño, sino justo cuando aterrizó en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas por agentes de la Policía Nacional. La arrestada ha vivido durante los últimos 10 años evitando la justicia húngara y europea en general. Por ello, llegaba a diferentes países y disponía con gran facilidad de acceso a documentación falsificada, lo que dificultaba todavía más su localización y detención.