Una anciana de 85 años pide ayuda en una nota a la enfermera que le pone la vacuna contra la Covid-19. "Ayúdenme, por favor, estoy secuestrada por mi hija y su marido" decía a la mujer en la carta que la salvó.

Una anciana pide ayuda al vacunarse

El proceso de vacunación ha sido uno de los hechos más importantes durante la pandemia causada por la Covid-19.

Las imágenes de las vacunaciones masivas han pasado de ser sorprendentes a ser del todo cotidianas. Pero este caso ha sorprendido a los sanitarios de Iztapalapa, en México.

Se trata del caso de una anciana de 85 años, a quien llevaron al centro de salud para ser vacunada el pasado domingo. Después de recibir la dosis, la mujer entregó un papelito a la enfermera que la había inoculado.

Una carta desesperada después de recibir la vacuna

La sanitaria descubrió un angustioso mensaje: "Ayúdenme, por favor, estoy secuestrada por mi hija y su marido". Y la peor parte era que los presuntos secuestradores eran las dos personas que la habían acompañado al centro sanitario.

Carta anciana secuestrada / Excelsior

Secuestran a una anciana de 85 años y ella pide ayuda en una carta a la enfermera que la vacuna contra el coronavirus / Excelsior

"Hace un año que estoy cerrada y no me dejan salir ni a la puerta de casa... Por favor, les pido que me saquen de aquí" acababa la nota en la que relataba que vivía en unas condiciones deplorables y que la humillaban continuamente.

"Ayudadme, por favor, estoy secuestrada"

La enfermera entregó la nota a los agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del distrito, que vigilaban la zona, y consiguieron detener a las dos personas acusadas por la anciana.

Se trataba de una mujer de 39 años que fue identificada como su hija y un hombre de 59, identificado como la pareja de la detenida.

Fueron puestos a disposición del Ministerio Público correspondiente, que definirá su situación jurídica y realizará una investigación para aclarar los motivos y las condiciones del presunto secuestro de la anciana.

Con respecto a la víctima, fue custodiada por un organismo de protección de víctimas de la localidad y se encuentra sana y salva hasta que el proceso judicial acabe y se aclare la situación.