Tom Holland y Zendaya, protagonistas de la última secuela de Spider-Man, el hombre araña, se han convertido en la pareja del momento. Ahora, han invertido más de tres millones de euros en un nuevo capricho: su primer nido de amor, una casa en el conocido barrio de Richmond, en Londres, Reino Unido. Así se ha cerrado el trato y será la residencia de sus sueños.
El último capricho de Tom Holland y Zendaya
Según los informes, que han confirmado que la relación ha llegado al siguiente nivel con la compra de esta casa, las dos estrellas de 25 años están convirtiendo Gran Bretaña en su base principal. Con seis habitaciones, esta mansión estará ubicada en el famoso barrio residencial londinense de Richmond, conocido por ser la residencia de celebridades como Mick Jagger, Angelina Jolie, Tom Hardy, Jerry Hall o David Attenborough. Valorada en tres millones de libras, alrededor de 3,5 millones de euros, será restaurada por la pareja.
De hecho, ya se ha hecho público que será la firma KGF Group la que liderará los cambios y reformas en la residencia, sumando una cifra de unos 300.000 euros. A pesar de la multitud de ceros que suman la adquisición de la casa, el dinero no parece ser un problema para la pareja. Y no es para menos, ya que Tom Holland está valorado en más 13 millones y Zendaya más de 11.
La primera casa de la pareja del momento
Entre las reformas se incluirá una sala de cine, un gimnasio y un estudio exclusivo para Tom, que además se encontrará cerca del lugar en el que creció, Kingston upon Thames, a unos seis kilómetros de su nueva residencia. El medio encargado de confirmar los hechos ha sido The Mirror.
La publicación informa que la pareja voló recientemente a Londres desde Los Ángeles para recoger las llaves de su nueva casa y planea mudarse allí durante el verano. El mismo diario recogía que fuentes del entorno de Holland y Zendaya aseguraba que "Están muy enamorados y querían que su primer hogar fuera Londres, donde creció Tom. Todos están emocionados por ellos".
La reconciliación de los tres Spider-Man
Esta noticia llega a la vez de la visita de Tom Holland a Barcelona para presentar el filme Uncharted, que ha causado un gran revuelo. Además, hace poco, en una entrevista con The Hollywood Reporter se sinceraba sobre su relación con sus antecesores. Se arrepentía, dijo, de no haber hablado con Andrew Garfield tras asumir el papel de Spider-Man. Garfield interpretó al superhéroe en The Amazing Spider-Man de 2012 y su secuela de 2014 The Amazing Spider-Man 2 antes de que Tom lo reemplazara en 2017.
Finalmente, en Spider-Man: No Way Home, la última, estrenada el año pasado, han podido hacer las paces, compartiendo pantalla con el primero de la secuela, Toby Maguire, con quienes se deshace en elogios en las entrevistas. "Gracias por ser tan amable y permitirme compartir esto contigo. Gracias por dar un salto de fe y regresar", le dedicaba al mítico Spider-Man que todos recordamos. Tobey no había actuado en casi 10 años, "así que todos nos abrazamos y todos lloramos porque significaba mucho para nosotros", remataba Holland.