Una zona boscosa de Corbera d'Ebre (Tarragona) escondía más de 300 kilos de cogollos de marihuana enterrados en agujeros en los terrenos de una finca. Los Mossos d'Esquadra de la Unidad de Investigación de Gandesa localizaron la mercancía, escondida en estos agujeros de un metro y medio de profundidad y tapadas con lonas, troncos de madera y tierra para disimular los tubos de hierro que servían como sistema de ventilación, gracias al descuido del traficante que se encargaba de vigilar este escondite: había colgado varias cámaras de seguridad de los árboles cercanos, dejando bien claro que había alguna cosa que se quería proteger.
Dentro de estos agujeros, separados en sacos de plástico, había un total de 370 kilos de cogollos de marihuana envasados al vacío y ya preparados para su distribución. Según las estimaciones de la policía catalana, el valor de toda esta droga ascendería a los dos millones y medio de euros. Al analizar las cámaras, vieron que estaban conectadas a una terminal receptora -como un móvil o una tablet- la señal de la cual les condujo hacia un domicilio de Mont-roig del Camp, donde se detuvo a un hombre de 58 años, cuya nacionalidad la policía catalana no ha querido comunicar, acusado de un delito de tráfico de drogas.
Investigan el trayecto que hacía la marihuana antes y después de pasar por la finca
Los agentes de la comisaría de Gandesa estaban investigando un punto de preparación y conservación de marihuana que localizaron el pasado mes de septiembre, y estas pesquisas los condujeron hasta la finca donde finalmente localizaron la droga. El detenido, aunque su domicilio habitual estaba en Mont-roig del Camp, había habilitado una caseta de madera para poder pasar la noche de manera puntual. La estructura poseía todo lo necesario para vivir allí, desde objetos de cocina hasta comida, ropa, mantas y bolsas de basura.
La investigación de los Mossos d'Esquadra continúa en marcha para poder determinar el origen y el destino de los más de 300 kilos de marihuana encontrados en esta zona boscosa de Corbera d'Ebre, y no se descartan más detenciones. Después de su arresto, el sospechoso pasó a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Gandesa.