La Policía Municipal de Madrid investiga una mujer acusada de maltrato animal después de que encontraran un local en el distrito de Ciudad Lineal lleno de decenas de gatos en pésimas condiciones higiénicas y sanitarias. Fue el pasado 10 de noviembre, cuando vecinos de la calle Virgen de la Consolación alertaron al cuerpo policial de la fuerte peste que desprendía el local. Varios agentes se desplazaron hasta el lugar para saber que podría estar provocando el olor, pero en aquel momento no había nadie que les abriera la puerta. Por este motivo, tuvieron que solicitar la presencia de los Bomberos para poder acceder por la fuerza.

Dentro del local, los agentes encontraron un auténtico horror. En un espacio sin luz natural ni artificial y con las ventanas exteriores tapadas, había 51 gatos que estaban malviviendo entre excrementos y no tenían ni comida ni agua. También se encontraron varias jaulas, tanto de grandes como pequeñas, que no tenían ningún mecanismo para que los animales pudieran alimentarse o hacer sus necesidades. De hecho, todos ellos estaban deshidratados y con una delgadez extrema, hasta el punto que uno de ellos estaba en unas condiciones de salud tan críticas que tuvo que ser sacrificado. El Servicio Veterinario Municipal se ha hecho cargo de los gatos, de los cuales solo 15 tenían chip identificador, mientras que se ha precintado el local y agentes de la Comisaría de Medio Ambiente están investigando a su propietaria.

Se hacía pasar por una protectora de animales

Según han podido descubrir los investigadores, el local donde se encontraron los gatos actuaba como una asociación protectora de animales, aunque en realidad no tenía ninguna licencia para ejercer como tal ni tampoco ningún seguro. Tampoco contaba con un veterinario y ni siquiera tenía un botiquín para primeros auxilios. Sin embargo, según detalla El Mundo, estaba previsto que el próximo 9 de diciembre celebraran un acontecimiento como supuesta protectora.