La tradición de lanzar botellas al mar con mensajes dentro lleva siendo muy popular varios siglos. Antiguamente, se usaba como forma de pedir ayuda cuando alguien se encontraba atrapado en algún territorio desconocido y necesitaba ser rescatado.
Con el paso de los años esta costumbre se fue haciendo más popular y muchas personas decidieron lanzar al mar algunos mensajes en botellas con la esperanza de que, algún día, alguien encontrase ese recipiente y leyese el contenido del mensaje que un día se escribió.
Hoy en día, con la popularidad de las redes sociales y la globalización sería relativamente sencillo poder encontrar a la persona que escribió un mensaje y lo puso dentro de la botella, aunque hayan pasado muchos años desde el momento en el que se lanzó al mar.
La imagen de lanzar una botella al mar se ha poetizado por su presencia en varias películas y series populares. Se podría considerar como el viaje de algo o simbolizar la conexión entre dos personas que, aunque no se conozcan de nada, establecen un vínculo entre ellas.
La botella que se ha hecho viral en las redes sociales
Recientemente se ha hecho muy conocida la historia de una botella que tenía un mensaje dentro. Muchas personas han decidido compartir esta bonita historia en las redes sociales después de que se conozcan los detalles del enorme viaje que hizo este peculiar recipiente durante varios años.
La persona que lanzó la botella al mar fue Joanna Buchan, lo hizo en el año 1996, cuando tenía ocho años. Dentro no decidió escribir un mensaje de socorro ni nada parecido, optó por hacer una especie de diario personal en forma de carta para que, algún día, lo leyese una persona muy lejos del barco desde el que lanzó la botella en Peterhead, una ciudad en Aberdeenshire, Escocia.
Recorrido de la botella / Google Maps
Todo formaba parte de una actividad que hicieron en su clase. En el texto Buchan explicaba quién era y varios datos personales como sus gustos y una descripción de su casa. Lo que la pequeña nunca imaginó es que su mensaje sería encontrado 25 años después a 1.287 kilómetros del lugar en el que lanzó la botella.
La carta fue encontrada por Elena Andreassen Haga, una mujer que de Gasvaer, una ciudad al norte de Noruega. Andreassen explicó su reacción al ver el peculiar recipiente con un mensaje dentro: "Abrimos la botella con mucho cuidado, probablemente llevaba mucho tiempo en el agua, pero conseguimos sacar el mensaje y fue fascinante descubrir que venía desde Escocia", comentó.
Ambas personas contactaron
Elena Andreassen decidió buscar a la niña del mensaje en la botella en las redes sociales. Después de comprobar varios perfiles encontró a una Joanna Buchan que era de Escocia y decidió enviarle un mensaje para explicarle que había encontrado la nota que escribió hace 25 años.
Actualmente, Buchan vive en Australia y trabaja allí como doctora. No recordaba claramente haber lanzado una botella con un mensaje, pero al recibir una foto a través de Facebook en la que se podía ver su mensaje y, por lo tanto, su letra todos los recuerdos le vinieron a la mente.
Joanna Buchan se mostró muy sorprendida, no podía creer que alguien hubiera encontrado su carta 25 años después. Comentó que le encantaría poder contactar con sus profesores para explicarles lo que había ocurrido y felicitarlos por la idea que tuvieron.