Las zonas boscosas son escenario ideal para los narcotraficantes que quieren montar una plantación de marihuana. Espacios amplios que quedan camuflados entre los árboles y luz natural. Si además hay algún arroyo próximo para captar el agua, mejor que mejor. Los Mossos d'Esquadra, sin embargo, están cada vez más enterados de este tipo de prácticas y la lucha para descubrirlas es incansable. Por eso se van haciendo patrullajes preventivos mirando los lugares donde se podrían instalar, así como revisando aquellas zonas dónde la policía catalana ya ha desmantelado algún cultivo para que no vuelva a montarse ninguno. Estos patrullajes, junto con la información que puedan recibir por parte de testigos, es clave para poder desmantelar estos bosques de marihuana, como ha pasado en la localidad de Vallclara, en la Conca de Barberà (Tarragona).
Cazados a punto de montar un cultivo con 2.000 plantas en medio del bosque
Agentes de la comisaría de Montblanc tuvieron conocimiento de la posible existencia de una plantación de marihuana en una zona boscosa de Vallclara y, con algunos indicios que así lo indicaban, este jueves por la mañana se montó un operativo que permitió confirmarlo. Se trataba de una zona de bosque en la que habían habilitado tres espacios para producir la droga, pero también para que los jardineros pudieran quedarse a vivir. Concretamente, uno de los espacios tenía dos tiendas de campaña para que pudieran dormir, otro una cocina y el tercero contaba con una balsa de riego, un invernadero y, al lado, el terreno desbrozado donde tenía que ir la plantación. De momento, sin embargo, todavía no habían trasplantado las plantas.
Los agentes intervinieron 816 plantas que había en tiestos en la zona desbrozada y 1.600 plantas más en la zona de invernadero. Además, pudieron detener a las dos personas que en aquellos momentos había en la plantación, dos hombres de 18 y 42 años sin antecedentes, de quienes los Mossos no ha querido facilitar la nacionalidad, como presuntos autores de un delito contra la salud pública en la vertiente del cultivo de drogas. Los dos han pasado hoy a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Valls.


