Una batida de caza nocturna en una finca rural de Los Navalucillos, un pequeño pueblo de Toledo, ha acabado de la peor forma posible. Un hombre de 79 años ha muerto al ser disparado con la escopeta por su hermano, quien después de los hechos ha sido detenido por la Guardia Civil, cuerpo encargado de la investigación del suceso. Los hechos han tenido lugar esta pasada madrugada de sábado, cuando pasaban pocos minutos de la medianoche, en un momento, bajo la oscuridad de la noche, en que la gente no acostumbra a salir a cazar y no se programan batidas, tal como ha detallado el alcalde del municipio, José Ángel Pérez Yepes.
Al recibir el aviso del incidente, hasta el lugar se han desplazado efectivos de la Guardia Civil y una ambulancia de apoyo, pero cuando han llegado los sanitarios ya no han podido hacer nada para salvar la vida del hombre y han confirmado su defunción. Por su parte, los efectivos policiales han detenido al autor del disparo mortal, el hermano pequeño de la víctima, de 74 años, mientras se está llevando a cabo la investigación con el fin de aclarar los hechos y saber qué pasó. La principal hipótesis con la cual trabajan a estas alturas los investigadores es que se trataría de un accidente de caza y que el hombre habría disparado a su hermano mayor de manera fortuita.
Eran cazadores expertos
La noticia ha trastornado Los Navalucillos, un municipio de unos 2.000 habitantes donde vivían los dos hermanos. Según ha detallado el alcalde a ABC, los dos eran expertos cazadores y estaban acostumbrados a hacer batidas nocturnas en el coto Los Lupes, donde tienen una casa de labranza y donde esta madrugada se ha producido la fatal tragedia. Últimamente, sin embargo, la víctima ya había comunicado en su entorno que había decidido no renovar su licencia de caza, ya que se había hecho demasiado mayor y no se veía capacitado.