Nueva noche de incidentes en la Font de la Pólvora, uno de los barrios más conflictivos de la ciudad de Girona. Esta madrugada, de domingo a lunes, un grupo de alborotadores, jóvenes de familias de etnia gitana que controlan el barrio, se ha enfrentado violentamente a la policía con lanzamientos de piedras contra los vehículos policiales, creando barricadas para dificultar la labor policial y quemando contenedores, según ha podido saber ElCaso.com.
Más incidentes en la Font de la Pólvora
Tras la reunión de urgencia entre el alcalde de la ciudad, el cupaire Benet Salellas, y la consellera de Interior, la socialista Núria Parlon, la semana pasada, en la que se pactó un "refuerzo especial" de la policía en la zona de la Font de la Pólvora, con presencia continuada del ARRO y de la Brigada Móvil (Brimo), los incidentes no se han detenido. Si el pasado fin de semana las protestas se originaron por los desalojos ejecutados en la zona —donde, incluso, un agente resultó herido durante la actuación policial—, este domingo por la noche se desconoce qué ha originado los disturbios.
La semana pasada, también durante el fin de semana, se intentó reocupar un piso que había sido desalojado judicialmente. La Unidad de Investigación de la comisaría de Girona será ahora la encargada de analizar los hechos de este domingo e investigarlos para intentar identificar a los autores y detenerlos por un delito de desórdenes públicos.
Piedras contra la policía
Sea como sea, los disturbios de esta noche se han registrado en el centro del barrio, y los agentes han sido emboscados por un grupo de una veintena de jóvenes que han lanzado piedras y han quemado contenedores para dificultar el patrullaje de las furgonetas antidisturbios de la policía catalana dentro del barrio. Las primeras pedradas se han hecho desde la calle Acàcia y han continuado en las calles Germans Lumière, Guadiana y Barranc. Este patrullaje en movimiento, que llevan a cabo desde la semana pasada equipos del ARRO y de la Brigada Móvil, no es bien recibido por los vecinos del barrio, que han optado por enfrentarse a la policía como venganza.
Las cuatro furgonetas —dos del ARRO y dos de la Brigada Móvil— han tenido que realizar varias maniobras para evitar quedar atrapadas por los alborotadores. A causa del lanzamiento de piedras, una furgoneta del ARRO ha resultado dañada, con una ventana rota. Por ahora, no consta que los violentos hayan asaltado ninguna instalación pública o privada, como sí ocurrió la semana pasada, cuando vandalizaron el centro cívico del barrio. Tampoco constan heridos entre los agentes policiales. Este refuerzo, aseguran fuentes policiales, continuará.
Más limpieza en el barrio
El Ayuntamiento de Girona y el Departamento de Interior también acordaron un refuerzo para dar apoyo policial a los operarios que tengan que acceder al barrio, y se seguirán ejecutando los desalojos ordenados judicialmente, aunque sean recibidos de manera hostil, como esta noche. Además, se incrementará la limpieza de la zona con el objetivo de dignificar el barrio e intentar recuperar la normalidad.