Los Mossos d'Esquadra y la Policía Local de Tàrrega han detenido a dos chicos de 21 y 25 años por su participación en el robo con violencia de una cadena de oro a una mujer que paseaba por la calle. Uno de ellos cometió el robo, mientras que el otro, a quien detuvieron por entrar en un edificio abandonado sin saber que también estaba implicado, se encargó de guardar la joya. Los hechos tuvieron lugar este lunes por la mañana, cuando un individuo asaltó a la víctima en la calle Sant Agustí de la capital del Urgell (Lleida), le arrancó la cadena de oro dándole un tirón por la espalda y huyó corriendo.
Inmediatamente, la víctima fue a denunciar los hechos a la comisaría de los Mossos y los agentes, gracias a la descripción facilitada por la mujer, pudieron saber que se trataba de un chico que, junto con otros jóvenes, había protagonizado varios delitos en Tàrrega en las últimas semanas. Una vez identificado el ladrón, se emitió una orden de detención y la Policía Local lo pudo detener durante la tarde en torno a las piscinas municipales. De la cadena de oro que había robado, sin embargo, no había ningún rastro.
Otro ladrón del grupo escondía la joya
Paralelamente, los cuerpos de emergencias recibieron el aviso de un incidente en un edificio abandonado en la calle Urgell, donde un individuo había entrado escalando por la fachada y rompiendo la ventana. Cuando los agentes llegaron al lugar, el chico cogió algunos de los cristales rotos, amenazó a los policías y empezó a autolesionarse. Finalmente, se consiguió que el joven depusiera su actitud y los sanitarios del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) lo atendieron por lesiones leves. Acto seguido, quedó detenido por daños, atentado contra los agentes de la autoridad y resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad.
Una vez lo trasladaron a comisaría, lo registraron esmeradamente para meterlo en los calabozos, tal como marca el protocolo, momento en que descubrieron que llevaba en el calcetín la cadena de oro que le habían robado a la mujer aquella misma mañana, motivo por el cual también se lo acusa de un robo violento. Los dos ladrones, de 21 y 25 años, de quienes los Mossos no han querido facilitar la nacionalidad, forman parte del mismo grupo de delincuentes y acumulan numerosos antecedentes policiales.