Aunque el spoofing no es un método de estafa nuevo, sí que los delincuentes lo van perfeccionando cada vez más. Se trata de una técnica en la cual los estafadores llaman a las víctimas por teléfono haciéndose pasar por alguien en quien confían, con la intención de conseguir sus datos personales. Hasta ahora, lo más habitual era que el estafador pidiera estos datos verbalmente y la víctima los facilitara, pero ahora han creado una nueva variante de la cual ha alertado a la Policía Nacional a través de sus redes sociales.
Los estafadores se hacen pasar por un falso empleado de una entidad bancaria y con cualquier excusa solicitan la contraseña de la cuenta corriente con el fin de, supuestamente, poder verificarlo. Los delincuentes aprovechan precisamente el argumento de que la llamada podría ser de un estafador y, por este motivo, le dicen que no diga la clave a nadie, sino que le enviarán un mensaje a través de SMS y podrá meter la contraseña allí. Lo cierto, sin embargo, es que el fraude consta al coger las pulsaciones a la hora de apretar el teclado del teléfono móvil para obtener las claves secretas.
Estafas cada vez más indetectables
Con el paso del tiempo, los estafadores van innovando y creando nuevas variantes de sus métodos cuando ya empiezan a ser conocidos, pero también perfeccionan las formas de llevarlos a cabo para que las víctimas no se den cuenta de que se trata de una estafa. En este sentido, desde la Policía Nacional alertan de un perfeccionamiento de la técnica de los estafadores, que suplantan los números de teléfono reales de entidades bancarias, instituciones públicas o compañías eléctricas. Así, si la víctima quiere mirar el número para asegurarse de que no es una estafa, se creerá que la llamada es real. Así cogerán más confianza con el interlocutor y serán más vulnerables a la hora de facilitar datos de los cuales después se acabaran arrepintiendo.