Esta semana se ha conocido que una trabajadora del Centre Penitenciari de Lledoners ha sufrido una agresión sexual en horario laboral. Los hechos sucedieron, según ha informado CCOO, el martes, 2 de septiembre, cuando una trabajadora realizaba la bajada obligatoria de las celdas. En un momento dado, el preso increpó a la funcionaria y se bajó los pantalones, enseñándole los genitales. La mujer pudo enfrentarse a la situación, haciendo que la agresión sexual no fuera a más, y denunció los hechos al cabo de los servicios del centro, que inmediatamente trasladaron al agresor al Departament Especial de Règim Tancat. El Departament de Justicia no ha querido aclarar información el agresor, como la edad, la nacionalidad o el motivo por el cual está interno.
La bajada obligatoria a las celdas es una operación que se realiza de manera diaria, donde los internos de la prisión tienen que bajar obligatoriamente al patio del centro o al comedor —exceptuando si tienen una baja médica. Según el sindicato, es una tarea en que la seguridad del servicio tendría que ser la máxima prioridad, y piden a las autoridades la "dotación necesaria de funcionarios para garantizar tanto la seguridad del personal como el buen funcionamiento del módulo".
La dirección de la prisión condena la agresión
Según han confirmado fuentes del Departamento de Justicia a ElCaso.com, la dirección de la Prisión de Lledoners, situada en Sant Joan de Vilatorrada (Bages), así como la Dirección General de Asuntos Penitenciarios de la Secretaría de Medidas Penales, han hecho un seguimiento esmerado de esta agresión, y han tomado todas las medidas de prevención y corrección en el marco del reglamento penitenciario para evitar que estas acciones vuelvan a suceder.