Salen a la luz unas agresiones sexuales que tuvieron lugar en el albergue municipal de Mataró (Barcelona), el albergue Can Solaret, en febrero del 2024. Una mujer sin techo ha denunciado que un hombre la forzó a hacerle felaciones en varias ocasiones cuando vivía allí, y que se marchó del centro por miedo a que la situación pudiera escalar. La víctima, además, tiene una discapacidad reconocida del 75% y llegó a Can Solaret a finales del año 2023 después de salir del hospital donde había ingresado por un ictus. Ha pasado un año desde las agresiones que relata y que ahora ha puesto en conocimiento de los Mossos d'Esquadra y que no ha hecho antes por el estado de shock en el que quedó después de estos abusos.
Las primeras semanas como usuaria del centro -gestionado por la Cruz Roja- transcurrieron sin incidentes. Todo cambió en febrero, cuando otro residente del albergue la esperó en la entrada del edificio, poco antes de la hora de cenar. La convenció para ir con él a una zona más apartada dónde la obligó a hacerle una felación. Esta situación se repitió pocas semanas después y, según asegura la víctima, al menos dos trabajadoras de Can Solaret vieron estas agresiones desde la ventana y no intervinieron.
Investigación en marcha, pero, de momento, ningún detenido
La denuncia interpuesta por la víctima ha hecho que los Mossos abran una investigación con el fin de aclarar qué pasó exactamente en este albergue hace un año. Por su parte, desde el Ayuntamiento de Mataró se han puesto a disposición de los investigadores para colaborar en lo que haga falta y condenan cualquier tipo de violencia, sobre todo la que "se ejerce contra una mujer en situación de vulnerabilidad". De momento, no consta ningún detenido.
La teniente de alcalde de Ciudad Inclusiva, Laura Seijo, ha explicado que no tenían conocimiento de estos hechos, a pesar de trabajar desde hace tiempo con la denunciante. Y ha añadido, en declaraciones a ACN, que están "en contacto permanente con el gestor del espacio para intentar averiguar qué ha pasado". Por otra parte, la víctima intervino hace pocas semanas en el pleno municipal reclamando "ayuda urgente" en forma de vivienda social, asegurando que había sufrido "maltratos", sin especificar en aquel momento a qué situación se refería.