Un disparo por la espalda y asfixiado. Estos fueron los dos métodos que utilizó este lunes el hombre de 72 años que mató a sus dos nietos, de 10 y 12 años, antes de suicidarse con una escopeta de caza tras haber permanecido toda la noche anterior atrincherado con ellos en Huétor Tájar (Granada). El informe preliminar de las autopsias a los dos hermanos menores de edad así lo ha revelado: establece que uno de ellos murió por disparo en la espalda o el costado y el otro por asfixia. El resultado preliminar se conoce justo después de que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Loja haya acordado este martes declarar secreta durante un mes la investigación sobre estos hechos.

El informe preliminar de la autopsia realizada a los tres cadáveres, los dos nietos y el abuelo, concluyó poco después de las tres de la tarde. Aunque los resultados evidencian lo que sucedió, según han informado fuentes próximas a la investigación a EFE, todavía falta por conocer el definitivo y el toxicológico.

Conmoción y el padre sedado tras el asesinato

El municipio de Huétor Tájar, de unos 10.000 habitantes, se encuentra completamente conmocionado por los hechos. El ayuntamiento ha pedido, en un breve comunicado, que se respete la intimidad de la familia de los fallecidos, un "ruego" dirigido a no generar más dolor ante la tragedia.

 Agentes de la Guardia Civil entre otras personas esperan a la puerta de la vivienda la salida del coche fúnebre con los cuerpos del hombre de 72 años que permanecía atrincherado con un arma de fuego desde la noche de ayer domingo junto a sus dos nietos, de 10 y 12 años, a los que ha matado y luego se ha suicidado, este lunes en la localidad granadina de Huétor Tajar / Miguel Ángel Molina, EFE
Agentes de la Guardia Civil entre otras personas esperan a la puerta de la vivienda la salida del coche fúnebre con los cuerpos del hombre de 72 años que permanecía atrincherado con un arma de fuego desde la noche del domingo junto a sus dos nietos, de 10 y 12 años, a los que ha matado y luego se ha suicidado, este lunes en la localidad granadina de Huétor Tajar / Miguel Ángel Molina, EFE

Tras conocer la muerte de los sus dos hijos, el padre de las víctimas tuvo que ser sedado y trasladado a un centro sanitario de Granada en el que este martes continúa recibiendo asistencia. Por otro lado, el funeral de los dos hermanos tendrá lugar previsiblemente este miércoles, el tercer y último día de luto oficial en su municipio. 

Negociación, asesinato y suicidio

El doble asesinato de los dos hermanos tuvo lugar la madrugada de este lunes en el municipio granadino de Huétor Tajar. El abuelo, un hombre de 72 años, mató a sus dos nietos, de 10 y 12 años, y se suicidó con una escopeta de caza después de haber permanecido toda la noche atrincherado con ellos en la vivienda familiar de la localidad. Aunque todo comenzó la noche de este domingo, al tener una fuerte discusión con su yerno y padre de los menores. El septuagenario sacó un arma de fuego y el progenitor de los dos niños abandonó la vivienda.

Tras ello, los vecinos alertaron al teléfono de emergencias 112, que dio aviso a la Guardia Civil, según informó el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández. Agentes de la Unidad Especial de Intervención (UEI) se desplazaron desde Madrid junto a un mediador que durante la madrugada estuvo negociando "casi permanentemente" con él hasta que sobre las cinco de la mañana el hombre les dijo que dejaba de hablar porque en un rato tenía que preparar a los menores para el colegio y el instituto.

La Guardia Civil, con criminalística, y los servicios funerarios en la puerta del domicilio donde se produjo el asesinado de los menores y posterior suicidio del abuelo / Arsenio Zurita, Europa Press
La Guardia Civil, con criminalística, y los servicios funerarios en la puerta del domicilio donde se produjo el asesinado de los menores y posterior suicidio del abuelo / Arsenio Zurita, Europa Press

Los agentes confiaron y se mantuvieron a la espera, vigilando. Pasaron las horas, dieron las ocho de la mañana y no se producía movimiento alguno. Los niños no salían. La Guardia Civil decidió actuar y y accedieron a la vivienda sobre las 8.25 horas de este lunes. Justo en el instante que se encontraban en el interior, el abuelo se suicidó con la escopeta de caza, para la que tenía licencia. Una vez en el interior, los policías hallaron sin vida a los menores en dos habitaciones distintas y ahora la autopsia ha confirmado que uno murió de un disparo en la espalda o el costado y el otro asfixiado.

Problemas de salud mental y accidente anterior del abuelo

La mujer del abuelo, la abuela materna de los dos niños asesinados, y su hija fallecieron el pasado mes de marzo en un accidente de tráfico en Loja (Granada). El siniestro se produjo como consecuencia de la colisión contra un muro del coche, que era conducido por el septuagenario que ahora ha matado a sus dos nietos, quien al parecer tuvo un desmayo. En el vehículo también iban sus nietos, que resultaron heridos.

Minuto de silencio en memoria de los niños asesinados en Huétor Tájar (Granada) / Ayuntamiento de Huétor Tájar
Minuto de silencio en memoria de los niños asesinados en Huétor Tájar (Granada) / Ayuntamiento de Huétor Tájar

El supuesto homicida, jubilado de una empresa de áridos, estaba recibiendo atención especializada por los problemas de salud mental que arrastraba desde el accidente, del que se sentía "culpable", según indicó el alcalde de Huétor Tájar, Fernando Delgado.  Añadió que nadie pudo pensar que la situación familiar pudiera llegar "a este extremo".