Los agentes de la Guardia Civil encargados de llevar a cabo una redada antidroga en Granada se han encontrado con una preocupante sorpresa. En medio de más de 300 plantas de marihuana almacenadas en una vivienda de la localidad de Albolote, apareció un niño de 11 años, dejado atrás por los padres, presuntamente los "jardineros" encargados de vigilar y cuidar la plantación, en un estado de abandono total. A estas alturas están trabajando para encontrar a los padres, que serán detenidos por un delito de abandono de menores, y se les investigará por este hecho y por su vinculación con la plantación de cannabis intervenida.

Los padres se desentendieron

Según han informado del Instituto a Armado, encontraron al niño en uno de los inmuebles para los que les constaba una orden de entrada y registro, obtenida en el marco de una operación contra el cultivo de marihuana. Durante la operación, el total de plantas requisadas casi llega a los 4.000, y se ha investigado y detenido a trece personas acusadas de pertenencia a grupo criminal y tráfico de drogas. Cuando entraron en una de las casas, encontraron al niño en medio de la plantación, completamente solo y con evidentes signos de haber estado desamparado.

Después de hablar con él, los agentes encontraron a unos amigos de los padres, quienes quedaron a cargo del menor. Los agentes, pues, centraron sus esfuerzos a localizar a los padres del niño, a quienes a estas alturas todavía no han podido encontrar. Los adultos serán detenidos en el momento de identificarlos por el delito de abandono de menores, y se abrirá una investigación para determinar su papel en la plantación de marihuana, aunque se cree que se trata de los "jardineros".

Esta actuación de la Guardia Civil ha llevado a la detención de trece personas por delitos contra la salud pública por cultivo y elaboración de droga y por defraudación del suministro eléctrico.