Al recibir un aviso de incendio en Granada, los bomberos se desplazan con intención de apagarlo y, al llegar, ven que el propietario ya se ha hecho cargo del fuego él solo. Deciden recorrer la vivienda para asegurarse que la situación esté controlada y descubren que el hombre, de 53 años, tiene una plantación de marihuana dentro con más de 150 plantas. La Policía Local arresta al hombre y lo acusa de un delito contra la salud pública y de otro de defraudación de fluido eléctrico.
Los hechos tienen lugar durante la noche de este jueves 26 de junio en Granada capital, más concretamente en la calle Arquitecto Modesto Cendoya. Al ver humo saliendo por las ventanas, algunos vecinos alarmados llamaron a los bomberos para avisar de un incendio al edificio, y, acompañados de la policía local del municipio andaluz, se dirigieron al lugar rápidamente. Al llegar, sin embargo, se llevaron algunas sorpresas. El propietario de la vivienda había conseguido extinguir el incendio por su cuenta y acabar con el riesgo que las llamas implicaban para los vecinos, pero, lógicamente, los agentes quisieron asegurarse que el incidente estaba completamente resuelto y que no había ningún riesgo aunque ya no hubiera fuego, así como estudiar qué había causado el incendio en el piso.
Más de 150 plantas de marihuana
Lo que no se esperaban ni bomberos ni policías eran que el incendio lo había causado un problema del suministro eléctrico, que el hombre tenía pinchado ilegalmente para poder cultivar su plantación de marihuana sin levantar sospechas. Dentro de la vivienda, se pudieron localizar más de 150 plantas de marihuana que el hombre cuidaba para poder traficar después con la droga que les extraía. Sin perder tiempo, los agentes de la Policía Local de Granada lo arrestaron y lo acusaron de un delito contra la salud pública y de otro de defraudación de fluido eléctrico. Por otra parte, los bomberos pudieron acabar de determinar que el incendio estaba oficialmente apagado y el edificio no corría peligro.