Se tiene que tener mucha confianza en uno mismo o se tiene que ser muy insensato para volver al mismo lugar donde| horas antes has cometido cinco robos. Por mucho que la primera vez haya salido bien, no hay nada que indique que la segunda vez también irá igual. Más bien al contrario, hay más posibilidad que te puedan reconocer y el robo acabe de la peor manera. Eso es lo que le ha pasado a un ladrón en Barcelona, que por querer repetir la experiencia muy pronto, al día siguiente mismo, ha acabado detenido y pasando la noche en comisaría.
El pasado martes, día de Sant Joan, el hombre entró en un hotel del barrio del Raval, en el centro de la capital catalana, consiguió robar en cinco habitaciones y se pudo marchar sin que nadie se diera cuenta de ello en aquellos momentos. No obstante, los clientes acabaron descubriendo que alguien se había llevado sus pertenencias de las habitaciones y lo explicaron al personal del establecimiento, que gracias a las cámaras de seguridad pudieron ver la cara del ladrón. Lo que no se debieron esperar, sin embargo, es que al día siguiente volviera a ir al hotel, posiblemente, a intentar robar en más habitaciones.
Vuelve al mismo hotel donde robó el día anterior y acaba detenido
Este miércoles, el hombre volvió al hotel, pero en esta ocasión, las trabajadoras lo reconocieron y el ladrón huyó corriendo. Agentes de la Guardia Urbana que se encontraban cerca del establecimiento, vieron cómo el hombre salía apremiado de forma sospechosa y lo pararon. Al preguntar al personal del hotel, este les explicó que el hombre había cometido cinco robos en habitaciones el día anterior. Cuando los policías lo registraron e inspeccionaron la mochila que llevaba encima, le encontraron herramientas para forzar puertas y una tarjeta sospechosa haber sido utilizada para acceder a las habitaciones. Por este motivo, el hombre quedó detenido como presunto autor de un robo con fuerza.