Los animalistas denuncian siete granjas de vacas de Asturias. Han difundido un vídeo donde se evidencia el maltrato animal que sufren los animales y donde los mismos trabajadores reconocen que están incumpliendo las leyes de bienestar animal.

Maltrato animal en las granjas de Asturias

La asociación de activistas animalistas Equalia ha difundido un reportaje audiovisual para denunciar el maltrato animal en las granjas. Han entrado en nueve granjas de Asturias y han grabado el estado deplorable en el que se encuentran estos animales y han concluido que hay varias irregularidades con respecto a las leyes de bienestar animal en siete de ellas.

Ternero encadenado / Equalia

Denuncian maltrato animal en siete granjas de Asturias / Equalia

Prácticas ilegales y animales en mal estado

"Se puede observar la excesiva delgadez de algunas vacas, así como las malas condiciones de las jaulas de los terneros, sucias y húmedas. Se ven suelos cubiertos totalmente de estiércol, y extrema suciedad en los recintos y en los abrevaderos de los terneros. Algunas prácticas ilegales, como el uso de barras electrificadas cono refuerzo negativo; y en desuso, como anillos de destete, en este caso en vacas adultas. Los terneros están atados con cuerdas y cadenas, sin cumplir el tiempo máximo estipulado por la normativa vigente. También hay animales enfermos, desatendidos y aislados, en un lugar inadecuado," explican desde de Equalia.

 

Además, en el vídeo también se puede apreciar como, presuntamente, un trabajador de la granja explica que algunas de las prácticas de la granja son ilegales: "Eso ha sido un invento mío que está sin homologar. Por ley, así no pueden estar, tienen que estar sueltas, pero hace más o menos 21 días que no lo están", haciendo referencia a un ternero atado con una correa de metal que le impide moverse.

Lista de las empresas denunciadas

Las empresas denunciadas por, presuntamente, irregularidades en el cumplimiento de las normativas de bienestar animal son las ganaderías con sede en Asturias, según explica Equalia.

Los propietarios de estos establecimientos se podrían enfrentar a sanciones económicas elevadas e incluso penas de prisión por un presunto delito de maltrato animal.