Los Mossos d'Esquadra han podido detener a un grupo de ladrones que, quién sabe si huyendo de un robo, se encontraron con un control inesperado. Los hechos tuvieron lugar el pasado 8 de noviembre, alrededor de las dos de la madrugada, cuando efectivos de la policía catalana y de la Policía Local de Llançà tenían montado un dispositivo conjunto de control de paso en el kilómetro 17,9 de la carretera N-260, a la altura de este municipio del Alt Empordà (Girona). Los agentes pararon un vehículo que se aproximaba con cuatro ocupantes en su interior y enseguida vieron que no les dejarían marchar como si nada.
Cuatro ladrones aun con el botín en el coche
Al inspeccionar el coche, los policías encontraron todo tipo de herramientas para cometer robos, desde ganzúas o decodificadores de cerraduras hasta pequeños metales o una sierra. Si no había suficientes indicios de que eran delincuentes, también se encontró el botín que llevaban encima: cuatro relojes —uno de ellos un Rolex falso—, unas gafas, una PlayStation 4 y 1.925 euros en efectivo. En el momento de identificarlos, la situación no mejoró. Según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com, se pudo comprobar que la persona que conducía el vehículo no tenía carnet y que uno de los otros ocupantes tenía documentación falsa.

Ante estos indicios, los cuatro individuos, hombres de 28, 34, 37 y 39 años, con diversos antecedentes policiales y de quienes no se ha facilitado la nacionalidad, quedaron detenidos como presuntos autores de un delito de robo con fuerza. En el caso del conductor también se le acusa de conducción sin carnet, mientras que al acompañante se le acusa de falsificación de documento público. Ahora, los Mossos d'Esquadra mantienen la investigación abierta para esclarecer de dónde venía este grupo de ladrones y de dónde han salido todos los productos que llevaban con ellos.