Un fugitivo kosovar buscado por la Interpol por asesinato ha sido arrestado en Barcelona por la Policía Nacional española. Los hechos se remontan al pasado seis de marzo, cuando un buque atracó en el puerto de la capital catalana y en la base de datos de la Dirección General de la Policía (DGP) saltó una alerta de que uno de los pasajeros tenía irregularidades en su documento. Agentes del indicativo Colón del puesto fronterizo marítimo del puerto de Barcelona se dirigieron al muelle donde había llegado el barco para verificar la documentación de esta persona.
Los agentes procedieron a revisar in situ el pasaporte del individuo sospechoso y lo escanearon para enviarlo al Punto Atenas, el call-center de la Policía Nacional que se dedica a comprobar, en menos de diez minutos, la veracidad de los documentos de identidad que envían los agentes desde cualquier lugar. En este caso, el informe técnico emitido por el Punto Atenas -y añadido a las diligencias policiales- determinó que el pasaporte había sido, en efecto, falsificado. A raíz de esta información se detuvo al hombre y se lo trasladó a dependencias policiales para verificar su identidad real.
Tenía un total dieciocho identidades falsas registradas
Una vez en comisaría, se le cogió una muestra de la huella dactilar que se cargó en la base de datos del Sistema Automático de Identificación Dactilar (SAID) que reveló su identidad como un fugitivo de nacionalidad kosovar buscado por las autoridades de su país y con una orden de detención emitida por la Interpol y por la Misión de las Naciones Unidas, por delitos de lesiones de muerte, homicidio o asesinato. Además, las posteriores pesquisas policiales revelaron que estaba dentro de las bases de datos con un total de dieciocho identidades diferentes.