Una peligrosa persecución entre Igualada y La Torre de Claramunt, en la Anoia (Barcelona), acabó este martes de madrugada con un accidente y tres hombres detenidos a quienes los agentes de los Mossos d'Esquadra encontraron un cuchillo con una hoja de once centímetros y un bate de béisbol que escondían en el coche. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las cuatro de la madrugada, que es la hora a la cual la Policía Local de Igualada detectó un turismo que circulaba a gran velocidad por las calles del municipio. Les intentaron parar, ya que iban a una velocidad muy superior a la permitida, pero el conductor hizo caso omiso y escapó por la carretera C-244 en dirección a Capellades. Los agentes municipales pidieron refuerzos a la policía catalana y se lanzaron en su persecución.
Patrullas de Trànsit y de Seguridad Ciudadana de los Mossos, así como de las policías de Igualada y de Vilanova del Camí, persiguieron el coche durante unos veinte minutos. A lo largo de este tiempo, no redujeron la velocidad e hicieron maniobras muy peligrosas para sortear a las patrullas cada vez que les intentaban parar. Su huida llegó a un final abrupto cuando el conductor perdió el control y se estrelló en el arcén de la carretera, ya dentro del término municipal de La Torre de Claramunt.
Tres detenidos y un adolescente identificado
De dentro del vehículo salieron corriendo cuatro personas que intentaron escapar a pie escondiéndose en una zona boscosa. La Policía Local de Igualada interceptó a uno de los hombres y los Mossos a los otros dos; el cuarto consiguió escapar. Los tres sospechosos, dos de 31 y uno de 43 años y de los cuales la policía catalana no ha querido comunicar las nacionalidades, fueron detenidos por los delitos de desobediencia, atentado contra los agentes de la autoridad y conducción temeraria.
La investigación continúa en marcha para averiguar por qué huían -si habían cometido algún delito o, simplemente, querían evitar una multa por conducir a demasiada velocidad-, pero, durante el registro del vehículo, encontraron que escondían un cuchillo con una hoja de once centímetros y un bate de béisbol metálico.
Con respecto a la cuarta persona, los Mossos d'Esquadra localizaron a un adolescente de 19 años que caminaba por el arcén de la C-244 el mismo martes al mediodía. Lo pararon para interrogarlo y, ante las respuestas incoherentes que dio, lo identificaron como susceptible de tratarse del cuarto sospechoso que escapó huyendo por el bosque; a falta de evidencias concretas para relacionarlo con los hechos, no fue posible detenerlo en aquel momento.