La Policía de Andorra detuvo este sábado a una pareja catalana que agredió y amenazó al vigilante de seguridad de una discoteca de Andorra la Vella. Ella, de 25 años, quedó acusada de un delito contra la integridad física y moral y de otro de lesiones, mientras que su novio, de 46, fue acusado de un delito contra la seguridad colectiva por esgrimir un arma de porte prohibido.
Los hechos se remontan a la madrugada del sábado en el interior de un conocido local de ocio nocturno de la capital del Principado. Uno de los empleados de seguridad se fijó en que un hombre acababa de entrar en el lavabo de mujeres como quien no quiere la cosa. El vigilante lo siguió y le llamó la atención para que fuera al lavabo de hombres. El interpelado se puso muy nervioso, primero, para acto seguido pasar a la agresividad. Otros trabajadores de seguridad también fueron a ver qué pasaba y ayudar a su compañero, y el hombre empujó a uno de ellos con mucha fuerza; desistieron de intentar calmarlo y procedieron a reducirlo. En aquel momento, apareció su pareja, armada con un vaso de cristal.
La joven mordió a uno de los vigilantes
La chica intentó agredir a los vigilantes con el vaso para que soltaran a su pareja. Como no lo consiguió, se lanzó encima de uno de los vigilantes de seguridad de la discoteca y lo mordió con mucha fuerza, provocándole una herida sangrante. Los trabajadores del local consiguieron reducirla, pero el hombre se marchó aprovechando la conmoción y la policía solo pudo arrestar a la mujer en el momento de ser requeridos.
No obstante, cuando los agentes ya se habían ido, la pareja de la detenida volvió a presentarse ante los vigilantes. Llevaba en la mano un defensa extensible, un arma de porte prohibido, con el que quiso agredir nuevamente a los empleados de seguridad. Rápidamente, se volvió a avisar a la policía y la patrulla volvió, le sacaron de las manos el bastón telescópico para evitar que le hiciera daño a alguien más y lo detuvieron.