Conmoción dentro de los cuerpos policiales. Carlos, un agente de 41 años de la Policía Nacional, ha fallecido a consecuencia de las graves heridas que un ladrón le ocasionó cuando intentaba evitar un robo. Los hechos tuvieron lugar el pasado 8 de noviembre en la localidad valenciana de Vinalesa, donde vivía el policía, cuando dos personas estaban intentando robar unos palomos deportivos. El agente, que en esos momentos estaba fuera de servicio, intervino para intentar impedir el robo, pero uno de los delincuentes le golpeó con una piedra en la cabeza y le provocó un fuerte traumatismo craneoencefálico.
Un vecino del municipio se encontró al agente de policía tendido en el suelo, inconsciente y ensangrentado, y rápidamente alertó de los hechos a los servicios de emergencias. Hasta el lugar, en la plaza de España de la localidad, se desplazaron efectivos sanitarios, que prestaron las primeras atenciones a la víctima y lo trasladaron hasta un centro hospitalario, donde ingresó en estado muy grave. Finalmente, tras dos semanas en coma inducido y que los médicos hicieran todo lo posible por salvarlo, el policía ha acabado muriendo.
Los autores de la agresión, detenidos
Los dos ladrones que atacaron a los policías, dos hermanastros de 15 y 21 años, con numerosos antecedentes por robos, pudieron ser identificados gracias a las cámaras de seguridad instaladas en la fachada del ayuntamiento, ubicado a pocos metros de distancia del lugar de la agresión. Se les detuvo en la localidad de Burjassot y, mientras el menor quedó en libertad tras pasar a disposición de la Fiscalía de Menores, el mayor, que está en tratamiento por una discapacidad intelectual y que sería el autor material de la agresión al agente, ingresó en prisión.