Al menos seis personas murieron asesinadas la madrugada de este domingo en Colorado Springs (Estados Unidos) tras ser disparadas mientras estaban en una fiesta de cumpleaños, ataque tras el que el atacante se habría suicidado. El homicida, Teodoro Macías, de 28 años, mantenía una relación sentimental con una de las víctimas, Sandra Ibarra, de 28 años, y estaba molesto después de que los parientes de su novia no lo invitaran a la festividad del fin de semana, según la policía.
Mata a la familia de su novia en una fiesta
Los agentes respondieron a una llamada de emergencia por disparos a las 00.18 horas y a su llegada encontraron seis adultos muertos y otro gravemente herido, que fue trasladado al hospital, donde debido a la gravedad de las heridas también falleció.
La investigación preliminar indica que se estaba celebrando una fiesta de cumpleaños de una de las fallecidas, y el sospechoso, novio de una de las víctimas, condujo hasta el lugar de la fiesta y abrió fuego contra los asistentes. Después se quitó la vida.
Diez personas de dos familias estaban dentro de la casa cuando Teodoro llegó “y disparó a las seis víctimas en rápida sucesión” antes de dispararse a sí mismo, afirma Joe Frabbiele, teniente de la policía de Colorado Springs. Cuando los oficiales llegaron al lugar de los hechos se toparon con José Gutiérrez, un hombre herido de bala que les indicó donde se hallaba el homicida. Gutiérrez murió más tarde en un hospital.
Las víctimas del tiroteo son familiares de su pareja, Sandra Ibarra, 28 años. Fueron identificados como Melvin Pérez, de 30 años; Mayra Ibarra de Pérez, 33; Joana Cruz, 52 años; José Gutiérrez, 21; y José Ibarra, 26.
Entre los asistentes también había tres niños, de 2,5 y 11 años. Afortunadamente los menores están a salvo, según NBC.
Comportamiento controlador y celoso
Teodoro Macías mantenía una relación con una de las fallecidas, Sandra Ibarra, desde aproximadamente un año y tenía un historial de comportamiento controlador y celoso, añade el teniente Joe Frabbiele. La policía dijo que no se informaron de incidentes de violencia doméstica durante la relación y que el agresor no tenía antecedentes penales.
Sin embargo, según el jefe de la policía Vince Niski, “en el centro de este horrible acto está la violencia doméstica” y agregó que el hombre armado había “mostrado problemas de poder y control” en la relación. Aproximadamente una semana antes del tiroteo, hubo otra reunión familiar donde hubo “algún tipo de conflicto” entre la familia y Macías, según Niski.
17 disparos en la fiesta
Los investigadores aún no saben cómo Teodoro Macías obtuvo el arma. Lo que sí se sabe es que fue comprada por otra persona en 2014 en una tienda de armas local y que no se denunció como robada. El atacante tenía dos cargadores de 15 cartuchos, uno de ellos vacío, y la policía recuperó 17 cartuchos gastados en el lugar.
Este incidente ha vuelto a abrir por enésima vez el debate sobre un mayor control de las armas de fuego en EEUU. Muchos demócratas alzaron su voz para instar al Senado a que apruebe una nueva legislación durante las últimas semanas.
Así se expresó el presidente del país, Joe Biden, quien exigió a la Cámara Alta en un comunicado que refuerce el control de las armas de fuego y deje de "aceptar" un tipo de violencia que "se ha convertido en algo demasiado normal" y causa 106 víctimas mortales al día en EEUU. "La violencia armada es una epidemia en Estados Unidos, pero no debemos aceptarla, debemos actuar", exhortó. Por ahora nada.