La Policía Federal de Australia ha acusado a un hombre de 45 años de 1.623 delitos de abuso sexual infantil, así como de más de un centenar de violaciones, a 91 niñas menores de edad entre los años 2007 y 2022. El sospechoso habría grabado miles de imágenes en su teléfono móvil y en cámaras digitales de las agresiones, que tuvieron lugar mientras trabajaba como maestro en varios jardines de infancia de Brisbane y Sídney, así como en otras ciudades del extranjero. Por otra parte, la policía del estado australiano de Nueva Gales del Sur también ha presentado cargos contra él por presuntos delitos de abusos sexuales a 23 niños menores de 10 años.

"Este es uno de los casos más horrorosos de presunto abuso sexual infantil que han visto nuestros investigadores" ha dicho en rueda de prensa el comisionado asistente de la Policía de Nueva Gales del Sur, Michael Fitzgerald. También ha informado de que, de las 91 niñas que salen a las grabaciones, 87 ya han sido identificadas. Algunas de ellas ya han cumplido los 18 años, y se ha informado tanto a ellas como a los padres de las otras menores de que hay una investigación en curso, y se les ha ofrecido la asistencia de los servicios de apoyo a víctimas de abusos sexuales.

Bajo custodia policial

El acusado fue detenido en Brisbane el pasado agosto, después de encontrar su perfil en un servidor de pornografía infantil. En aquel momento se le imputaron dos delitos de producción de material sobre explotación sexual de menores, y la consiguiente investigación reveló los miles de grabaciones caseras que poseía en sus dispositivos. "Dado que había tantas imágenes y vídeos de menores grabados a lo largo de 15 años, el proceso de identificación ha requerido tiempo, habilidad y determinación", han explicado desde la policía.

Como parte de las pesquisas, los agentes llevaron a cabo entradas y registros en varios jardines de infancia donde el acusado había trabajado, así como en su vivienda del Gold Coast, en Queensland. Con todas las pruebas recopiladas, el hombre está se enfrenta a 136 cargos por violación de niñas menores de 10 años, 68 para mantener relaciones sexuales con menores de 10 años, 42 por encuentro sexual con agravante con una persona menor de 10 años y 69 por asalto indecente agravado. Por otra parte, también está acusado de 604 delitos de trato indecente a menores de 16 años y 613 de producción de material de explotación sexual grabados mientras trabajaba en diez parvularios diferentes del estado de Nueva Gales del Sur.