Trabajar en una empresa durante más de 25 años no es siempre sinónimo de tener buenas relaciones. El mejor ejemplo de eso es un hombre malagueño de 71 años que, un tiempo después de jubilarse, decidió volver a la que fue su segunda casa durante un cuarto de siglo con la intención de quemarlo todo hasta los cimientos. Para agravar la situación, en las instalaciones de la empresa se almacena material químico, todo productos inflamables que no ayudan a frenar la propagación de las llamas.
El blanco del atentado del septuagenario era una nave industrial situada en el polígono El Viso de Málaga. La sala de emergencias recibió una llamada por parte del propietario de la empresa, según la cual avisaba de que un antiguo empleado suyo había provocado un incendio en unos contenedores junto a la empresa después de amenazar con "quemarlo todo". Varias patrullas de la Policía Nacional acudieron al servicio. Cuando llegaron, solo estaba el propietario, que manifestó que no era la primera vez que esta persona profería amenazas de este tipo.
Armado con siete mecheros
Una patrulla de la Brigada Local de Seguridad Ciudadana hizo una búsqueda por los alrededores de la empresa y de las naves que le pertenecen, y encontraron al sospechoso escondido dentro de un vehículo, aparcado muy cerca de los contenedores que había incendiado. Cuando lo hicieron salir, vieron que estaba en posesión de hasta siete mecheros que tenía intención de utilizar para quemar toda la empresa. Los agentes los intervinieron y lo detuvieron. El hombre, lejos de justificarse, admitió los hechos y recalcó su intención de continuar con su afán pirómano hasta quemar toda la empresa.
El sospechoso fue arrestado por los delitos de amenazas graves, incendio provocado y daños, y lo trasladaron a comisaría.