Los testigos del asesinato en el túnel de Madrid ayer por la noche explican que un grupo de tres personas lo perseguían. Las personas presentes observaron que atacaron al joven y le dieron cuatro puñaladas a la espalda en el túnel del barrio del Pacífico, Madrid.

Los testigos vieron tres personas persiguiendo el joven

Cuando fueron interrogados, los testigos describieron los hechos a los agentes policiales. El joven de 18 años era perseguido por tres personas durante el trayecto cuando volvía a casa.

En el interior del túnel llegaron donde este estaba y lo atacaron. Al menos le dieron cuatro puñaladas a la espalda, produciendo una pérdida de una gran cantidad de sangre.

La policía cree que podría ser un caso de venganza

Todavía se desconocen las causas de esta agresión. El Grupo IV de Homicidios de la Policía Nacional no descarta ninguna hipótesis sobre los motivos del asesinato.

No obstante, hay indicios de que el joven y los agresores de que eran conocidos. La Policía Nacional ha negado que haya sido un robo. Concretan que podría ser un caso de venganza.

Momento de la intervanción de los equipos de emergencia en Madrid / Cedida

El joven murió ayer por cuatro puñaladas

El ataque se ha producido a las nueve de la noche en el túnel situado entre el Retiro y el distrito de Arganzuela. El joven muerto estaba retornando a su casa cuando fue apuñalado.

Dos médicos fueron los primeros al atender al chico. Los doctores fueron los primeros a verlo, los dos estaban en los coches en marcha y pararon para atender al joven.

Este se encontraba al suelo sangrando de forma abundante. Los profesionales procedieron a su reanimación hasta que llegaran los efectivos del Samur-Protecció Civil.

La actuación de los efectivos sanitarios no consiguieron reanimarlo

El diagnóstico son cuatro heridas de arma blanca en la zona de la espalda. Dos de las cuatro heridas son penetrantes. Cuando llegó la ambulancia, ya se encontraba en parada respiratoria. Así y todo, continuaron con la reanimación durante 30 minutos.

También se le insertaron drenajes para conseguir que se estabilizara. Cuando observaron que el joven no podría ser reanimado, aturaron la intervención médica. Como no respondió, certificaron su muerte. La madre recibió servicios psicológicos, ya que vivían por la zona donde el joven murió.

La psicóloga formaba parte del dispositivo desplegado del Samur-Protección Civil, este se había desplegado a causa del ataque contra el joven. La Policía Municipal de Madrid cortó el túnel y prohibió el paso a todos los vehículos.

El túnel estaba a disposición de los sanitarios. La policía también colaboró de forma inmediata en la asistencia sanitaria para intentar reanimar a la víctima.