La llegada del verano, el buen tiempo y las vacaciones hace que muchos municipios de costa se llenen de turistas que van a pasar unos días. Este es el caso de localidades de la Costa Dorada como Calafell o el Vendrell, que pueden llegar a multiplicar por cuatro o por cinco la población que tienen los meses de invierno. Esta aglomeración de personas provoca que los ladrones puedan pasar más desapercibidos y hacer de las suyas sin que los puedan detectar. Eso es lo que han intentado tres individuos que este jueves intentaron robar en un supermercado de Coma-ruga, uno de los barrios marítimos del Vendrell.

Había dos policías en el supermercado donde querían robar

Las tres personas entraron en el supermercado y empezaron a cargar el carro de la compra con varios productos de la misma manera que hacía la otra gente que había en el establecimiento. La diferencia, sin embargo, fue que, cuando ya tenían los carros llenos de artículos hasta arriba de todo, intentaron salir evitando pasar por la caja para pagarlo. La mala suerte que tuvieron fue que en el supermercado también había dos agentes de la Policía Local del Vendrell. Los policías vieron la situación y pararon a los tres individuos.

Después de alertar de los hechos y pedir la presencia de otra patrulla, los efectivos policiales revisaron todos los productos que los ladrones llevaban en el interior de los carros. En total, se calcula que había artículos por una cantidad aproximada de unos 600 euros, según detalla el Diari de Tarragona. Por este motivo, los tres individuos fueron detenidos acusado de ser los presuntos autores de un delito de hurto.

Productos que no son de primera necesidad

Muchos de los artículos que intentaban sustraer los ladrones no eran de primera necesidad. De hecho, según han confirmado varios estudios, durante los meses de verano los hábitos de los ladrones cambian y, además de producirse más robos, los productos que se llevan son bien diferentes de los del resto del año. En Catalunya, por ejemplo, se suele robar bebidas alcohólicas y comida, aunque también hay productos más típicos de la época como helados, antimosquitos, cremas solares, gafas de sol o chancletas.