La Policía Nacional está buscando al hombre que esta pasada madrugada, presuntamente, ha prendido fuego al piso de su expareja en Lorca, Murcia, en el cual había siete niños en el interior, entre ellos los tres hijos de la mujer. Los hechos han tenido lugar poco antes de las tres y media de la mañana en una vivienda del paseo de Los Ángeles. La misma víctima ha alertado a los servicios de emergencia diciendo que había fuego en su casa y las llamas y el humo empezaban a extenderse por toda la vivienda. Según ha explicado, había podido ver que el incendio había sido provocado por su exmarido, del que hacía poco que se había divorciado y sobre el que tenía una orden de alejamiento.

Rápidamente, se han activado varias dotaciones de los bomberos para apagar las llamas. La mujer y los siete niños, tres de ellos hijos de la pareja y los otros cuatro, según parece, sobrinos, han tenido que ser evacuados por el balcón con una grúa. También se ha tenido que evacuar a los vecinos del piso de al lado, un matrimonio con cuatro hijos, porque las llamas ya habían avanzado hacia el rellano y no podían huir. Efectivos de la Policía Local de Lorca, de la Policía Nacional y sanitarios también se han activado, pero no se ha tenido que atender ninguna persona herida. El piso de la mujer ha quedado completamente calcinado. Se ha abierto una investigación de los hechos y se está buscando al pirómano, a un hombre marroquí de entre 40 y 45 años.

Los vecinos tenían miedo del hombre porque era muy violento

El incendio que ha provocado al fugitivo no ha sorprendido a los vecinos. Según apuntan, el hombre era muy violento y agresivo. Acostumbraba a llegar borracho a casa y protagonizar peleas y discusiones con su exmujer. Los vecinos del piso del lado, incluso, se alternaban los horarios del trabajo para que los niños no se quedaran solos en casa, ya que tenían miedo de que el hombre pudiera provocar alguna desgracia. A causa del incendio tuvieron que salir corriendo y los servicios sociales los han podido realojar temporalmente en un albergue. Según explican, sin embargo, no sabían que la pareja se había separado y que el hombre tenía una orden de alejamiento.

El piso ha acabado calcinado | Marcel Guillén / EFE