Un hombre ha sido detenido este sábado por la mañana en el municipio francés de Mormant, a unos 50 kilómetros en el este de París, después de que confesara haber matado a su mujer y a sus dos hijas pequeñas, de 5 años y 22 meses, a puñaladas. Según la emisora France Bleu, el hombre ha salido a la calle y ha atacado a varias personas, momento en el cual un policía fuera de servicio que se dirigía a comisaría a iniciar su turno, lo ha reducido. Los hechos han tenido lugar a las seis y media de la mañana y, aparte de las víctimas mortales, hay dos personas heridas, afortunadamente, leves.

Los testigos han alertado a los gendarmes, pero, antes de que pudieran llegar las patrullas, un policía fuera de servicio ha intervenido. El hombre ha sido trasladado a comisaría, detenido solo por la agresión a los vecinos, ya que, hasta aquel momento, nada parecía indicar que hubiera cometido un crimen tan terrible. Una vez en la sala de interrogaciones, ha acabado confesando el asesinato de su familia, y varias patrullas se han dirigido a su piso, en la plaza del Cheval Blanc, donde han encontrado los cadáveres con heridas de arma blanca.

No estaba en el sistema por violencia de género, pero tenía antecedentes psiquiátricos

La investigación, en una fase inicial, ha revelado que el hombre no tenía antecedentes judiciales por violencia de género, pero sí que había sido hospitalizado en varias ocasiones por motivos psicológicos. En estos momentos, la principal hipótesis con la que trabajan los policías es que ha podido sufrir un brote psicótico de algún tipo que lo ha impulsado a acabar con la vida de su familia. De hecho, fuentes de la Fiscalía de Francia han explicado a los medios del país que su estado después del arresto no era "compatible" con quedarse en los calabozos de comisaría y ha sido trasladado a un hospital.

Por otra parte, se ha recuperado un cuchillo del domicilio familiar, aunque se desconoce a estas alturas si es el mismo que ha utilizado para matar a su pareja y a las hijas de ambos, un extremo que tendrán que confirmar las pruebas forenses en las próximas horas. Los gendarmes de la Unidad de Investigación de París se han hecho cargo del caso, y trabajan para aclarar las circunstancias de este terrible crimen.