La Junta de Andalucía investiga una grave intoxicación alimentaria que se habría producido en un establecimiento de restauración de la ciudad de Córdoba y que ya habría dejado, como mínimo, a 72 personas afectadas. La gran mayoría han presentado síntomas leves como dolor de barriga y diarrea, aunque unas pocas sí que han tenido que recibir asistencia médica en un centro hospitalario. Entre estas hay una mujer de 63 años que ha acabado muriendo, aunque a estas alturas todavía no se ha podido confirmar si la causa de la muerte ha sido ingerir el alimento en mal estado.

Unos montaditos de pringá, el origen de la intoxicación

Aunque la investigación se ha iniciado este pasado 13 de enero, a raíz de la primera denuncia, las intoxicaciones se habrían producido el pasado 4 de enero. Aquel día se celebró un cumpleaños con 44 personas, todas con síntomas de intoxicación. Aquel mismo día, sin embargo, en el establecimiento se habían celebrado dos acontecimientos, una comida y una cena, y al contactar con los otros comensales descubrieron que se encontraban en la misma situación. El único alimento que habían consumido todos ellos eran unos montaditos de pringá, que a estas alturas se piensa que es el origen de la intoxicación masiva.

Los investigadores de Salud Pública de la Junta de Andalucía se desplazaron este miércoles hasta el restaurante, que ha seguido abierto desde entonces, y cogió muestras de la carne infectada, que han sido enviadas al laboratorio para su análisis. Se trata de una carne que almacenan congelada, aunque desde el establecimiento apuntan que los montaditos los hacen en el mismo restaurante. Desde las autoridades hacen un seguimiento a las personas intoxicadas y a las personas que habrían manipulado la carne, que hasta ahora no han presentado ningún síntoma. Se pide a las personas que han comido este alimento en Córdoba y presenten alguno de los síntomas que lo denuncien con el fin de poner en conocimiento que hay más intoxicados.