Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado 21 de abril a un hombre de 46 años acusado de un delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas, así como por conducir bajo los efectos del alcohol y de las drogas. El arrestado sufrió un accidente con su coche y se estrelló contra la fachada de un edificio en Vilabertran, en Girona. Cuando llegaron las patrullas de la policía catalana activadas a raíz del siniestro, se encontraron el coche a rebosar de hachís y de marihuana, y en el conductor escondido a un par de metros con evidentes signos de ir ebrio.

Los hechos tuvieron lugar hacia la una menos cuarto de la madrugada, que es la hora a la cual los agentes localizaron el turismo accidentado con la parte delantera abollada y el maletero abierto de par en par. La pared contra la cual había chocado había sufrido varios daños también, pero el conductor no estaba por ningún sitio. Cuando hicieron un peinado de la zona, se encontraron al hombre escondido tras otro coche aparcado solo a dos metros de donde se había estrellado. Al lado de él había una bolsa de deporte y tres bolsas de basura.

Llevaba el coche saturado de droga

Cuando abrieron las bolsas vieron que estaban llenas de droga. En concreto, tenía 329 tabletas de hachís, que en total subían a los 34 kilos; y 24 kilos de ovillos de marihuana envasados al vacío. Después de hacer la tasación de la mercancía que transportaba el camello, determinaron que el hachís tenía un valor de 65.649,37 euros y la marihuana de 44.689,79.

La bolsa de deporte que escondía en el coche / Mossos d'Esquadra

Además, cuando se acercaron al sospechoso para identificarlo, notaron que se tambaleaba al caminar, tenía los ojos vidriosos y hablaba titubeante y de manera muy pastosa. Por eso, lo sometieron a una prueba de alcoholemia y a otra de drogas. Las dos dieron un resultado positivo, con 0,50 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y una alta concentración de opiáceos.

Por todo eso, lo esposaron, detenido, y lo trasladaron a comisaría. El hombre ya tenía antecedentes por delitos relacionados con las drogas, y pasó a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Figueres.

También tenía tres bolsas de basura llenas de marihuana / Mossos d'Esquadra.