La Policía Nacional ha detenido en la localidad de Santa Cristina d'Aro, en el Baix Empordà (Girona), a un ciudadano español de 42 años buscado por las autoridades de Perú acusado de tráfico de drogas. El hombre contaba con una Orden Internacional de Detención (OID) en vigor por un delito contra la salud pública emitida en el año 2023 y la justicia del país sudamericano pide para él una condena de 15 años de prisión por, supuestamente, enviar grandes cantidades de cocaína de Perú hasta España a través de su empresa de paquetería.
Cocaína escondida en fundas de cuchillos
Los hechos por los cuales el ahora detenido podría pasar más de una década entre rejas en Perú tuvieron lugar en el año 2008, cuando el hombre era propietario de una empresa de paquetería. A través de ella solicitó un cargamento de varios productos al país sudamericano, pero a las autoridades peruanas les pareció sospechoso y decidieron revisar la mercancía antes de que embarcara. Entre los diversos productos había instrumentos musicales, prendas de ropa, monederos o cuchillos. Estos últimos iban en unas fundas que, como descubrieron al abrirlas, contenían una sustancia blanca. Cuando le hicieron las pruebas de detección de drogas, se confirmó que se trataba de 865 gramos de clorhidrato de cocaína.
Las autoridades peruanas abrieron una investigación que los llevó hasta el propietario de la empresa de paquetería que había solicitado el cargamento. No obstante, no fue hasta 2023 que emitieron la Orden Internacional de Detención (OID) y la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Girona abrió una investigación para localizarlo y detenerlo. Después de varias gestiones, se descubrió que hacía vida aparentemente normal y vivía en un chalet de grandes dimensiones en una urbanización aislada de Santa Cristina d'Aro. Ya no tenía la empresa de paquetería que había utilizado para traficar con la droga, sino que ahora tenía una de mantenimiento.
Con todas las indagaciones hechas, la Policía Nacional montó un dispositivo para poder detenerlo y le empezaron a hacer un seguimiento por la urbanización mientras iba con una furgoneta de su empresa acompañado de uno de sus trabajadores. Finalmente, otra patrulla con agentes de paisano le pudo cerrar el paso y lo detuvieron. El hombre está a la espera de ser extraditado a Perú, donde quedará a disposición de la justicia del país sudamericano y se enfrentará a 15 años de cárcel.