El antiguo Hotel Mediterráneo, en la calle de la Penitència de Sant Feliu de Guíxols, en el Baix Empordà (Girona), fuente durante años de conflictos y disturbios a causa de los ocupas que se habían instalado, ha sido liberado este sábado por la mañana después de que la mediación de la Policía Local del municipio y de los funcionarios del Área de Acción Social del Ayuntamiento haya conseguido que los dos inquilinos ilegales que todavía estaban allí se marcharan por su propio pie. Y no solo eso: también han acordado con ellos que abandonen definitivamente el municipio y ambos, un hombre y una mujer, han dejado atrás Sant Feliu para establecerse en otro lugar.
El hotel, sellado para evitar que otros ocupas se instalen
Tan pronto como los dos ocupas han abandonado el hotel, desde el Ayuntamiento se ha procedido a sellar y tapiar todos los accesos para evitar que otras personas puedan decidir instalarse en un futuro. Los vecinos del municipio, por fin, podrán descansar tranquilos después de años en los que han predominado las situaciones de conflicto y de tensión entre ellos y los ocupas. Desde el Equipo de Gobierno municipal han querido destacar a través de un comunicado que ha sido la tarea de mediación que se ha hecho de manera coordinada entre diferentes áreas y servicios la que ha conseguido que de manera "conjunta y discreta" el resultado fuera el esperado.
Este hotel es el último de los hermanos Anlló que todavía no se ha podido vender después de dos subastas infructuosas. Los hermanos Joan y Francesc Anlló, hoteleros de renombre de la Costa Brava, murieron el año 2002 sin dejar ni descendencia ni testamento, por lo que sus propiedades pasaron a manos de la Generalitat, que a finales del 2023 se vio obligada a parar la subasta por la presencia, justamente, de los ocupas.