Trágica explosión mortal en un bloque de pisos en la ciudad belga de Amberes. La deflagración este jueves de la parte superior de un edificio en el distrito de Hoboken ha dejado cuatro víctimas mortales. En las primeras tareas de búsqueda entre los escombros se pudo encontrar los cadáveres de tres personas y este viernes por la mañana se ha podido localizar una cuarta. Los equipos de emergencias, sin embargo, siguen rastreando entre los restos de la explosión buscando a una quinta persona que se encuentra desaparecida y que no ha dado ninguna señal de vida desde el momento de la deflagración. Además, hay seis personas heridas, tres en estado grave y tres leves.

Dos españolas entre las víctimas mortales

Las autoridades belgas trabajan para aclarar las causas de la explosión con la principal hipótesis que se habría producido por un posible escape de gas. Paralelamente, se están practicando las pruebas que permitan identificar a las víctimas. De momento, ya se ha podido identificar a tres, un hombre marroquí de 53 años, que trabajaba en un supermercado próximo al lugar de los hechos, y dos españolas. Se trata de una mujer de 42 años y su hija, de 10 años, originarias de Ceuta, tal como ha anunciado el presidente de la ciudad autónoma, Juan Jesús Vivas, que ha trasladado su pésame a los familiares y amigos.

Mina y su hija Houda hacía muy poco tiempo que se habían trasladado a vivir a Bélgica. A pesar de eso, desde la escuela donde estaba inscrita la niña, que sufría síndrome de Down, han explicado que todos los alumnos y profesores están en estado de shock por lo que le ha pasado. En Ceuta, la menor había estudiado en un centro de educación especial y había participado desde los tres años a la Asociación Síndrome de Down de Ceuta, entidad que ha querido recordarla a ella y a su madre después de la tragedia. "Eran muy queridas tanto por los usuarios como por los profesionales" del centro han explicado, lamentando "enormemente esta irreparable pérdida".