Siete personas detenidas y cuatro agentes heridos es el balance del desalojo de un piso ocupa que tuvo lugar este martes en el municipio de Llançà, en el Alt Empordà (Girona). Los hechos sucedieron sobre las once y media de la mañana en una vivienda de la calle de Núria, donde la comitiva judicial, con el apoyo de seis agentes del Grupo de Intervención Rápida de la Policía Local de Llançà y el apoyo de dos unidades de la Policía Nacional, tenía el orden de echar a las personas que estaban viviendo allí de manera ilegal. Cuando llegaron, sin embargo, la respuesta de los ocupas fue de todo menos amable.
Recibieron a los policías a golpes y amenazas
Las siete personas que había en el interior del inmueble los estaban esperando en una actitud muy violenta y se resistieron a marcharse todo lo que pudieron. Agredieron a cuatro de los policías que habían ido a echarlos, provocándoles varias heridas. Además, uno de los ocupas llegó a exhibir un cuchillo con el cual amenazó a los policías e intentó apuñalar a uno de ellos. Ante esta situación, los efectivos de los cuerpos policiales intentaron hacer tareas de mediación y negociar con ellos para que salieran de la vivienda, pero en todo momento los ocupas se negaron. Finalmente, los agentes tuvieron que utilizar pistolas de gas pimienta para reducir a los siete ocupantes de la vivienda.
Una vez los echaron de la vivienda, los siete ocupas quedaron detenidos por un delito de atentado contra los agentes de la autoridad y otro de desobediencia grave. Además, cuando los agentes entraron en la vivienda para registrarlo, encontraron marihuana, motivo por el cual también se les acusa de un delito contra la salud pública. Con respecto a los cuatro policías que resultaron heridos, fueron trasladados al dispensario municipal donde se les atendió de las heridas y recibieron el alta médica. En el piso, una vez desalojado, se ha cambiado la puerta y la cerradura y se ha instalado un sistema de alarma para que no vuelva a estar ocupado.
