Agentes de la Policía Nacional han detenido en Sant Antoni de Calonge, en Girona, a un hombre de nacionalidad francesa que tenía vigente una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) por haber matado a tiros a otro hombre. La víctima pertenecía a una banda criminal que rivalizaba con el grupo del detenido, que se citó con él en la localidad de Drôme, al sureste del país, con la excusa de resolver un problema entre ellos, pero acabó asesinándolo.
Estos hechos ocurrieron el pasado mes de mayo, y desde entonces que el ahora arrestado se había esfumado. Después de varios meses de búsqueda, y gracias a la colaboración entre policías europeas a través de la red ENFAST, se le ha podido localizar en este municipio de la Costa Brava, donde se había escondido haciéndose pasar por su hermano, y tiñéndose el pelo para intentar pasar desapercibido. El hombre, que responde al sobrenombre de "Libélula", llegó a Girona en coche después de cometer el asesinato, y quemó el vehículo para no dejar pruebas. Además de huir de la justicia, también intentaba esconderse de la otra banda, por temor a posibles represalias por la muerte a tiros de uno de sus miembros.
Peligrosa persecución por las azoteas
Los agentes de la Policía Nacional localizaron al fugitivo en Sant Antoni de Calonge, donde estaba alojado en casa de unos familiares. Los investigadores desplegaron un amplio dispositivo para poder atraparlo, rodeando el inmueble donde estaba escondido. Al darse cuenta de que había sido descubierto, el prófugo intentó escapar por los tejados, obligando a los agentes a perseguirlo de casa en casa hasta que, finalmente, lo pudieron atrapar.
"Libélula" es un viejo conocido de la policía francesa, por pertenecer a una banda criminal que operaba a Drôme, y que había cometido numerosos delitos relacionados con el crimen organizado. A estas alturas está en dependencias policiales a la espera de ser extraditado.