La Policía Municipal de Sabadell ha conseguido esta semana el decomiso de droga más importante en la historia del cuerpo local. La mañana del pasado lunes, 6 de noviembre, recibieron el aviso que un camión se había averiado y había quedado parado en el lateral de la Gran Vía, justo delante del Hospital Parc Taulí, impidiendo el paso al resto de vehículos en sentido norte. Varios agentes se desplazaron hasta el lugar con el fin de ayudar al conductor con la avería y regular la circulación del tráfico en la zona, pero cuando llegaron notaron un olor muy fuerte de hachís, lo que hizo levantar las sospechas de los policías y que pidieran la intervención de la unidad canina K9.
Los agentes, junto con los perros expertos en detectar sustancias estupefacientes, inspeccionaron el vehículo de grandes dimensiones, que en la parte posterior solo contenía una gran cantidad de tubos metálicos. Sin embargo, los animales detectaron que dentro del tráiler había droga. Así pues, los policías, para comprobar el interior de los tubos, los perforaron con un taladro, confirmando que había hachís escondido dentro.
Más de 300 kilos de hachís
En un primer momento, se calculó que había una decena de kilos, pero al acabar de revisar todos los tubos, así como partes de la estructura del camión, han descubierto que había más de 315 kilos de hachís, convirtiéndose en el decomiso de droga más grande que nunca haya hecho la Policía Municipal de Sabadell. Ante esta situación, el conductor del camión averiado, un hombre marroquí que hasta ahora no tenía antecedentes policiales, fue detenido acusado de ser el presunto autor de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.