Dos personas equipadas con armas largas atracaron este domingo por la mañana la discoteca Maccäo, en el municipio de San Javier, en Murcia, poco después de que finalizara un concierto del famoso cantante Omar Montes. Los hechos tuvieron a las ocho de la mañana cuando el local ya había cerrado las puertas y los clientes se habían marchado, pero en su interior todavía había cuatro trabajadores. Los dos ladrones utilizaron las armas de fuego, que todavía no se ha podido determinar si eran reales o simuladas, para amenazar a los empleados y llevaron así el dinero de la recaudación. Los trabajadores le dieron el dinero y los delincuentes pudieron huir a toda prisa sin que ninguna persona resultara herida.
Un asalto planificado hecho por profesionales
La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación del robo que, según todo apunta por la manera de actuar, estaría planificado y llevado a cabo por ladrones profesionales. Según detalla La Opinión de Murcia, los asaltantes accedieron por la parte posterior del establecimiento, justo en un momento en que se empezaban a montar los puestos del mercadillo que está el domingo por la mañana en la zona. Del interior de la discoteca se llevaron miles de euros de la recaudación del concierto de Omar Montes, a un cantante muy reconocido y que atrae a mucha gente. Por este motivo, se sospecha que los ladrones sabían muy bien cuándo actuar y que la madrugada de este domingo sería cuando más dinero habría en la caja registradora.
Los investigadores están inspeccionando las imágenes de las cámaras de seguridad que les ha facilitado la discoteca por si pueden encontrar alguna pista que ayude a identificar a los autores del robo por poder detenerlos o el coche en el cual han huido después de los hechos, que habría sido robado anteriormente en la ciudad de Murcia. Los agentes de la Guardia Civil sospechan que detrás del atraco podría haber una banda especializada en este tipo de asaltos y que en este caso, como acostumbra a ser habitual en estos tipos de grupo, se acabarán deshaciendo del vehículo prendiéndole fuego para intentar deshacerse de todas las pruebas posibles.