El creciente incivismo que ha llegado con la proliferación de los supermercados 24 horas a la Part Baixa de Tarragona ha obligado al Ayuntamiento a tomar medidas para limitar el horario de abertura de estos locales, directamente vinculados a peleas, disturbios de todo tipo e, incluso, a algún apuñalamiento. Las quejas vecinales sobre las molestias que ocasiona la presencia constante de personas -muchas, sin tener en consideración la limitación de ruidos en la calle en horario nocturno- se sumaron a un incidente violento el pasado mes de junio en la calle de Orosí. Y es que el propietario de uno de estos supermercados abiertos las 24 horas del día recibió un navajazo por parte de un cliente a quien no quiso vender una botella de alcohol por estar fuera del horario permitido - desde las diez de la noche hasta las ocho de la mañana del día siguiente. El suceso puso en alerta tanto a la Guàrdia Urbana como al consistorio y se comprometieron a encontrar una solución.
Solución que encontraron en forma del artículo 3.7 de la Ley 18/2017 del 1 de agosto de comercio, servicios y ferias, que permite limitar los horarios de apertura de estos locales por la noche "por razones de orden público, de convivencia o medioambientales". Se analizaron las quejas vecinales y también las diferentes denuncias interpuestas en la zona por disturbios en la zona, así como los informes hechos sobre cada uno de estos establecimientos 24 horas para poder determinar con seguridad el origen de la problemática. Con todo eso, el Ayuntamiento ya ha restringido el horario de un supermercado en concreto, situado en la calle de Apodaca. Pero el local se resiste.
El primer supermercado con limitación horaria se resiste a bajar la persiana por las noches
A pesar de la ordenanza municipal de limitar el horario nocturno, este primer establecimiento ya ha recibido cuatro denuncias por incumplir la franja de cierre, solo la primera semana de aplicación de la medida, según el Diari Més. Desde las diez de la noche hasta las ocho de la mañana, el comercio tendría que mantener la persiana bajada, restringiendo su actividad al día y a las primeras horas de la noche. No obstante, lo han pillado en varias ocasiones manteniendo la apertura toda la noche; incluso, detectaron que hacían ventas a través de la reja después de haber pasado la patrulla de la Guàrdia Urbana de Tarragona para obligarlo a cerrar. Este incumplimiento comportará multas económicas, según el Ayuntamiento, para garantizar que los tenderos y propietarios de estos locales cumplen con la ordenanza. Habrá que ver si, durante las próximas semanas, y a medida que se limite el horario de más supermercados 24 horas, los niveles de incivismo se reducen en esta zona de Tarragona.