La magistrada de la Audiencia Provincial de las Baleares ha absuelto de un delito de homicidio a Pau Rigo, el abuelo que en el año 2018 mató de un tiro de escopeta a un ladrón que había entrado a robar en su casa en Porreres, en Mallorca. Esta sentencia llega después de que en el juicio que se celebró el pasado mes de septiembre un jurado popular concluyera que el hombre, que ahora tiene 83 años, era culpable. Tres días más tarde, sin embargo, desde el Ministerio Público declararon la nulidad del juicio alegando que "no se habían alcanzado el número de votos necesarios para la declaración de culpabilidad", ya que cinco personas habían votado a favor y cuatro en contra, un número insuficiente.

La defensa de Pau Rigo recurrió la nulidad al Tribunal Superior de Justicia de las Islas Baleares. El abogado del acusado, Jaime Campaner, defendió que, si no se había llegado al número mínimo de votos para declararlo culpable, no hacía falta anular el juicio y celebrar uno nuevo, sino que se le tenía que absolver. Además, recordaba que en otro punto, el jurado popular declaró por unanimidad que no había disparado con la intención de matarlo. Desde el TSJIB aceptaron el recurso, pero no se pronunciaron sobre el veredicto, que quedó a cargo de la Audiencia Provincial. Finalmente, la magistrada ha decidido absolverlo tal como pedía la defensa del abuelo, en contra de la petición de prisión de la Fiscalía, que pedía tres años y medio de cárcel, y de la madre del ladrón, que había llegado a pedir quince.

Mató al ladrón por miedo a que lo matara

Los hechos en cuestión tuvieron lugar en febrero de 2018, cuando Freddy y Mauricio Escobar Benítez, dos hermanos gemelos colombianos de 25 años, planificaron el asalto a la casa del abuelo, entonces de 78 años, sabiendo que acababa de vender su empresa y podía guardar mucho dinero en la caja fuerte. Por eso, también contaron con la colaboración de dos ladrones más, Marcos Rotger y José Antonio Sánchez. Los cuatro entraron en casa del hombre, pero este, por miedo a que les mataran a él y a su mujer, cogió una escopeta que tenía cargada, después de que ya le hubieran entrado a robar unos meses antes, y disparó contra uno de los ladrones, que acabó muriendo poco después en el hospital.

En el juicio, además de Pau Rigo, acusado de homicidio por matar Mauricio Escobar Benítez, también se jugaba los otros tres ladrones, el hermano del difunto, Rotger y Sánchez. La magistrada de la Audiencia Provincial de las Baleares también se ha pronunciado sobre sus veredictos, condenando a Freddy a cuatro años y once meses de prisión para ejecutar el robo y por lesiones, a otro ladrón a cuatro años y ocho meses de prisión como autor intelectual del robo con violencia en casa habitada y al tercero a cuatro años y seis meses de prisión por cooperar en la planificación del asalto.