Impresionante vídeo de un encuentro de moteros que fue grabado en la A-2 y que puso en grave riesgo la seguridad de los usuarios de la vía y de los mismos conductores. Los Mossos d'Esquadra, ahora, después de una investigación hecha por los agentes del Grup de Recerca i Documentació de la División de Tráfico y agentes del Área Regional de Tráfico del Camp de Tarragona les han podido identificar tres de los motoristas, tres hombres, de 24, 24 y 19 años, acusados penalmente de delitos contra la seguridad vial por conducción temeraria, originar un riesgo grave para la circulación y, uno de ellos, para conducir un vehículo de motor sin permiso por pérdida de vigencia.

Según ha informado la policía catalana en una nota de prensa este miércoles, la investigación se inició el 29 de enero de este año cuando varios conductores llamaron a los Mossos avisando de la circulación de un grupo de unas setenta motocicletas por la autovía A-2, entre Sant Joan Despí y Castellbisbal, que ocupaban toda la vía y obstaculizaban el paso del resto de usuarios, y algunos de ellos haciendo conducciones temerarias consistentes a circular con la rueda delantera levantada -modalidad conocida como whelie- y de pie en las motocicletas.

 

Los avisos que recibieron los Mossos puso en alerta el grupo especial de Trànsit, el Grup de Recerca i Documentació (GRD), que ya estaba haciendo un seguimiento a las redes sociales de encuentros de un grupo de motoristas, principalmente en polígonos industriales del Baix Llobregat, donde practicaban whelie, y que posteriormente colgaban vídeos en Instagram y TikTok. Según la policía, estos encuentros son muy difíciles de localizar porque solamente se concreta el día y si será por la mañana, por la tarde o por la noche, pero la ubicación y la hora acostumbran a difundirse por canales privados de otras redes sociales con un par de horas de antelación, un hecho que complica que los Mossos d'Esquadra se puedan organizar para pararlos.

Buscan un cuarto conductor

El grupo que estaba bajo la lupa de los Mossos había convocado por aquel día un encuentro con el grupo que había circulado temerariamente por la autovía A-2 el día 29 de enero. En las imágenes subidas a las redes por el mismo grupo, se observó que muchos de los participantes circulaban con la placa de matrícula oculta bien por mascarillas, o bien porque la motocicleta tenía instalado un dispositivo de ocultación.

Con las imágenes que se subieron en redes públicas los Mossos pudieron contrastar la identificación de tres conductores, que fueron denunciados penalmente, e intervenidos una de las motocicletas participantes, que quedó a disposición judicial. Los Mossos buscan un cuarto conductor que circulaba con una motocicleta con placa de matrícula andorrana.

Nueva encontrada el 5 de marzo

El pasado 5 de marzo se convocó otro encuentro, que fue detectado también por los Mossos, activando varios recursos como antidisturbios del ARRO y también el helicóptero policial, pero por la preparación que tenían los participantes en el encuentro, que tenían motos en avanzadilla para alertar de controles policiales, cuando detectaron que había policía en la vía y que sobrevolaba el helicóptero de los Mossos el grupo se fraccionó y se disolvió la "rider out" sin conductas delictivas contra la seguridad vial como las que habían sucedido el 29 de enero. La policía sí que denunció administrativamente a una treintena de motoristas por|para varias infracciones.