El famoso cantante de trap barcelonés Cecilio G ha sido detenido este jueves en el Sónar Festival: se ha bajado los pantalones y se ha masturbado delante de una chica y ha agredido a dos vigilantes de seguridad y a un agente de los Mossos d'Esquadra. Actualmente, todavía está arrestado y a la espera de pasar a disposición judicial, donde se decidirá si entra en la prisión provisionalmente o si queda en libertad con cargos.
Los hechos pasaron el jueves a pocos metros de la plaza España de Barcelona, delante del Starbucks que hay al lado. Ha sido ahí cuando, presuntamente, se ha bajado los pantalones y se ha empezado a masturbar delante de una chica, que ha alertado a un vigilante de seguridad.
Vídeo de la detención de Cecilio G en Barcelona
Tal como se puede ver en el vídeo, que ha corrido como la pólvora en las redes sociales, los vigilantes de seguridad lo intentan reducir, pero él opone mucha resistencia para evitarlo. Cuando el guardia de seguridad ha llegado al lugar de los hechos, Cecilio G ha actuado con mucha violencia y le ha dado un puñetazo.
También ha agredido a otro trabajador dándole un cabezazo, aunque, finalmente, lo ha conseguido retener y lo han entregado a los Mossos d'Esquadra, que lo han detenido como presunto autor de los hechos.
Amenazas, mucha resistencia y agresiones a dos vigilantes y a un mosso d'esquadra
Cuando ya estaba custodiado por los Mossos, ha agredido a un agente de la policía catalana. Los sanitarios del Sistema de Emergencias (SEM) que atendieron al cantante pudieron comprobar que estaba bajo los efectos de las drogas y que, a causa de su estado, tenía que ingresar en el hospital. Según ha podido saber el diario Metrópoli Abierta, Juan Cecilia Ruiz, conocido popularmente como Cecilio G, ha amenazado a los agentes y ha mostrado mucha resistencia.
Cecilio G ya ha estado en la prisión: antecedentes de amenazas y robo con fuerza
No es la primera vez que este famoso cantante de trap tiene problemas con la justicia. De hecho, estuvo una temporada en la prisión, ya que fue condenado a un año y un mes de prisión por un delito de amenazas, por unos hechos del 2015 en el metro de Barcelona. A esta condena se le sumó otra de dos años antes, en 2013, ya que se demostró que este cantante cometió un robo con fuerza.
Esa entrada en la cárcel sorprendió mucho a la gente de su entorno, ya que pensaban que, presentando su historial psiquiátrico, donde se muestra que sufre un trastorno mental, se evitaría su entrada en la prisión, pero no fue así.