Tinder se ha convertido en una de las aplicaciones para conocer gente más famosas, formando miles de parejas, citas y amistades. Sin embargo, como todo avance tecnológico, hay un lado oscuro, las estafas. Uno de los ejemplos más flagrantes ha sido el representado por el documental El timador de Tinder, de Netflix, que explica a través de los testimonios de tres víctimas la historia de Shimon Hayut, que robó alrededor de diez millones con estafas amorosas. A pesar de sonar muy peliculero, hay casos a pequeña escala que acaban siendo pesadillas más que reales, por lo que es importante estar prevenidos ante la posibilidad de ser timados. ¿Cuáles son los trucos para que no nos engañen los estafadores de Tinder?

Tinder, donde encontrar el amor o la ruina

Puede pasar que la realidad no se ajuste al perfil de Tinder con el que habíamos quedado y la persona no nos guste, pero en este caso hablamos de estafas de miles de euros que no vuelven, amenazas y coacciones, que además, en el caso del timador de Tinder, no han tenido consecuencias penales. Es por eso que hay que llevar el máximo cuidado y detectar a tiempo los perfiles que puedan vaciarnos la cuenta con falsas promesas de amor.

Albert Cavallé - Sergi Alcazar

El estafador del amor Albert Cavallé ha robado miles de euros a distintas mujeres en Barcelona / Sergi Alcàzar

El modus operandi, también utilizado por el estafador barcelonés Albert Cavallé, suele repetirse en casi todos los casos. Crean una falsa ilusión de poder y riquezas -proveniente de lo robado a otras personas-, atrayendo a sus víctimas, a las que después conquistan atacando a sus flaquezas, que detectan al momento, haciéndoles caer rendidas ante las declaraciones de amor, promesas de futuros en común o incluso materializándose en pisos compartidos. El detonante de la estafa es entonces un problema económico con diferentes pretextos: una emergencia, conflictos con la justicia o con enemigos suelen ser los más frecuentes.

Estafas del amor: préstamos ilimitados y amenazas

Para ello piden a sus víctimas, ya enamoradas, un préstamo, al que luego se van añadiendo ceros y acaba en amenazas o coacciones cuando las estafadas se niegan a seguir dando dinero. Su mayor capacidad es conocer las debilidades de la persona que van a estafar, por lo que hay que saber detectar las posibles mentiras o engaños antes de que empiecen las peticiones de dinero. El primer consejo siempre es no dejar dinero a alguien que no conozcamos, por muy fiables que parezcan sus redes sociales. 

Timador de Tinder / Archivo

Las redes sociales del timador de Tinder parecían totalmente reales / Archivo

Es por eso que recomiendan conocer en persona cuando nos sintamos preparados y evitar prestar dinero que no nos podamos permitir y que, en caso de que no nos lo devolviesen, no nos arruinasen. Igualmente, recomiendan investigar a nuestra cita en Google y redes sociales, para conocer su pasado, aunque en el caso del timador de Tinder todo había sido maquinado para aparecer a ojos de internet como el hijo de un magnate israelí de los diamantes.

Todos los trucos para que no te engañen

Ante la duda, siempre es mejor no dejar dinero, sobre todo si esa persona no es de nuestra confianza plena o nos genera algún tipo de duda. Es recomendable no acceder al primer préstamo, ya que luego solo hacen más que crecer, así como dejar claro desde el principio nuestra posición con el dinero propio, manteniendo un perfil bajo sin hablar de lo que tenemos en el banco ni de lo que poseemos o podemos tener.

Por otro lado, es importante apoyarnos en nuestro entorno más cercano: amigos, amigas y familia pueden ser la clave para ver los indicadores de algo turbio, ya que estas terceras personas podrán verlo imparcialmente y alejadas de las emociones y sentimientos de los que se aprovechan los estafadores de Tinder. Por eso, tener un confidente o alguien con quien hablar del tema puede ser uno de los trucos más fáciles. De hecho, el problema de algunas de las víctimas es que se sienten tan avergonzadas de haber caído en la trampa que tardan un tiempo decisivo en hacerlo público, dificultando la investigación.

Evidentemente y en último lugar, si hemos caído o estamos seguros de que la persona con quien hablamos trata de engañarnos, es esencial denunciarlo a la policía y hablar con las entidades bancarias para que tengan información suficiente y sean capaces de detectar otros casos como el nuestro y evitar que el timador, como hizo Simon Leviev, el alias del timador de Tinder, siga ganando dinero a costa de otras víctimas.