Román Abramóvich es una de las 150 personas más ricas del mundo. Ha trabajado como empresario y como político durante varias décadas. Se le conoce, principalmente, por ser el dueño del actual campeón de la UEFA Champions Legaue, el Chelsea Football Club.

En 2006 fue catalogado por la revista Forbes como la undécima persona más rica del mundo. Sus negocios se basan principalmente en las empresas petroleras, aunque se trata de una persona polifacética, ya que es el gestor y dueño de entidades que se dedican a otras funciones.

Siempre fue un gran aficionado del fútbol por lo que en verano de 2003 decidió comprar el Chelsea por 165 millones de euros. El equipo londinense tenía graves problemas económicos y el empresario ruso canceló su deuda. Además, no dudó en invertir mucho dinero para convertir a los blues en uno de los mejores clubes del planeta.

Desde que él es el propietario el Chelsea ha logrado ganar la Champions League dos veces, jamás un equipo de Londres había conseguido esta gesta. Lo hizo en 2012 con Roberto Di Matteo en el banquillo y en la última edición disputada con el alemán Thomas Tuchel comandando una plantilla con jugadores como Ngolo Kanté, Mateo Kovacic o Antonio Rüdiguer.

Los yates de Abramóvich

Román Abramóvich se crió con sus tíos en Moscú en una familia judía. Comenzó a trabajar en los sectores del petróleo y el gas gracias a los contactos de su tío. Con la caída de la URSS las empresas energéticas se privatizaron, por lo que Abramóvich logró ganar mucho dinero en un corto periodo de tiempo con Sibneft, su compañía, que vendió a Gazprom en 2005.

Se estima que actualmente su patrimonio es de unos 13.500 millones de euros. Es un gran aficionado a los yates y actualmente tiene seis, el más impresionante es el Eclipse, que es el segundo más grande el mundo, tiene nueve pisos y 170 metros de eslora. También está equipado con todo tipo de lujos, dos piscinas, dos helipuertos, gimnasio, discoteca, spa y hasta un sistema antimisiles. Esta embarcación, por la que pagó 300 millones de euros, tiene también un submarino y tres lanchas a motor.

Roman Abramovich EP (1)

Abramóvich con Azpilicueta / Europa Press

Recientemente, ha comprado otro por 500 millones de euros, el Solaris, de 140 metros de eslora que tiene capacidad para 96 personas, contando a la tripulación. Sus barcos se han visto varias veces atracados en los puertos de Mallorca e Ibiza en verano. 

Las casas del millonario ruso

La casa en la que vivía habitualmente está en Londres, aunque hace un par de años que trasladó su residencia a Israel. Está situada en el barrio de Chelsea, muy cerca del Támesis. Es una mansión de 115 millones de euros que tiene en su parcela una casa para invitados, otra para el servicio y su propia galería de arte.

En Tel Aviv vive en una casa a pocos metros de la playa, concretamente en el puerto de Jaffa. Su vivienda había sido anteriormente un lujoso hotel, pero decidió pagar 25 millones de euros para convertirlo en su vivienda. También ha comprado varios inmuebles más en países como Chipre, Francia, Austria y el Archipiélago de Guadalupe.

El ruso también es un amante del arte, es una pasión que le inculcó Dasha Zhukova, su exmujer. En 2010 compró un cuadro de Picasso por 82 millones de euros, siendo este el cuadro más caro del artista malagueño. 

También pagó casi 400 millones de euros para restaurar la New Holland Island, una isla artificial creada en los tiempos de la URSS en la costa de San Petersburgo. Abramóvich la convirtió en un centro de arte contemporáneo.