Los Venenos, el colectivo de la Asamblea Feminista de la facultad de Medicina y Enfermería de la Universidad de Girona (UdG) ha denunciado públicamente a un profesor de la facultad por "abuso de poder", ya que tenía comportamientos inadecuados, hacía comentarios obscenos y enviaba mensajes desagradables a sus alumnas. Se trata de una situación que el colectivo asegura que se repite desde hace "bastante tiempo". Aunque se ha apartado al hombre de la docencia de cara el próximo curso "por razones de organización interna", lamentan que la universidad no haya tomado acciones directas y punitivas contra el profesor.

La denuncia, que por ahora sólo es una denuncia pública, la ha hecho el colectivo de Les Metzines a través de su cuenta de Instagram después de estudiar la situación con las afectadas y los órganos competentes de la universidad. Tal como asegura el colectivo, que ha acompañado la publicación con algunos de los mensajes que el profesor enviaba a sus alumnas, no pararán de "luchar hasta que "el entorno educativo sea un sitio seguro para todo el alumnado".

El profesor contactaba a sus alumnas a través de las redes sociales

El profesor en cuestión, cuya identidad no puede revelarse, empezaba a seguir a sus alumnas "sistemáticamente" en las redes sociales, especialmente en Instagram. A través de esta plataforma, el hombre enviaba a las chicas mensajes obscenos y desagradables, acompañados de emoticonos sonrientes o que guiñan el ojo, denotando así que sus segundas intenciones. El profesor en cuestión respondía las historias de sus alumnas con calificativos físicos, como "Sexyyyysss" o "Qué guapa".

Otros mensajes que el profesor enviaba a sus alumnas decían "Muy guapa... pero descansa un poco, "Ánimos guapa, ¿¿todo controlado??" o "¿Nerviosa? No hombre... ahora que ya has salido del grupo de cardio... ya no te tienes que poner nerviosa". Los mensajes siempre iban acompañados de emoticonos que sonríen, guiñan el ojo, sacan la lengua o se tapan los ojos, entre otros. El individuo también había enviado otros mensajes más explícitos. En uno de los que recoge el colectivo a la denuncia pública, se puede leer al profesor haciendo un juego de palabras con "ampolla" (botella), diciendo: "Ampolla... contiene una palabra dentro..."; en otro, el hombre envía: "Si puedo ayudarte... ya sabes", y guiña el ojo. Todas las conversaciones muestran la insistencia del profesor para contactar a sus alumnas y que le respondan los mensajes. Los Venenos puntualizan que este comunicado se trata de una denuncia pública; para emprender medidas legales, se necesita tanto la personificación de la denunciante (con nombres y apellidos) como la aportación de testigos, los cuales, en este caso, han sido anónimos ante las consecuencias que revelar su identidad podía comportar.

El colectivo lamenta que no se hayan tomado acciones punitivas

Las alumnas hicieron llegar los mensajes a la Asamblea Feminista de la facultad de Medicina y Enfermería de la UdG, la cual se puso a trabajar a investigar el asunto y poner fin a los comportamientos obscenos del docente. El colectivo trasladó la problemática a la delegada de Género de la UdG y redactaron una carta de denuncia, que remitieron en el mismo órgano.

Después de recibir la carta de denuncia, tal como relatan a Les Metzines a Instagram, la delegada de Género se reunió "a puerta cerrada" con el decano de la facultad y el profesor implicado, quien se defendió diciendo que toda la situación "era un malentendido". El colectivo también explica que la facultad no ha tomado acciones directas o de carácter punitivo hacia el docente, quien no ejercerá la docencia el próximo curso "por razones de organización interna". No obstante, tal y como expresan, existe la posibilidad de que, en cualquier momento, el profesor vuelva a impartir clases. Además, el colectivo muestra su malestar porque el docente "probablemente continúe en contacto con las alumnas a través de las prácticas clínicas". Finalmente, denuncian que no se haya realizado ninguna intervención "de carácter formativo" para corregir las actitudes inapropiadas, y que se les ha pedido no hacer público el nombre del profesor. Por otra parte, la UdG ha asegurado que no puede actuar ante denuncias anónimas, y pide que no se sancione nadie desde el anonimato, según ha podido saber la ACN.