La Policía Nacional ha desmantelado en Barcelona una banda criminal que había concertado, como mínimo, casi 700 parejas de hecho para conseguir, de manera fraudulenta, papeles para personas extranjeras que viven en Catalunya. La investigación se inició en una asesoría del Eixample de Barcelona y ha culminado ahora con la detención de ocho personas y la incautación de más de 80.000 euros en efectivo.

Las investigaciones empezaron el mes de septiembre pasado cuando agentes de la Policía Nacional que luchan contra la inmigración ilegal tuvieron conocimiento de una asesoría de Barcelona que estaban detrás de la tramitación de un considerable número de solicitudes de tarjeta de familiar comunitaria, sobre la base de la constitución de parejas de hecho estables y que presentarían indicios de ser fraudulentas.

Casi 700 parejas de hechos fraudolentes

Después de un rastreo de estas solicitudes se detectaron un total de 683 solicitudes presentadas en Barcelona entre cuyos años 2017 y 2020 en un número destacado se había intercedido el pago por la concertación de una relación ficticia para conseguir permiso de residencia.

Policía Nacional / Dinero

Imagen del dinero confiscado por la Policía Nacional en la operación contra la banda criminal de parejas falsas / CNP

La organización investigada cobraba a los ciudadanos extranjeros en situación irregular cantidades que oscilan entre los 6.000 y los 8.000 euros, precio que incluía la realización y acompañamiento en todos los trámites administrativos necesarios (padrón, notaría, Registro de Parejas Estables de Catalunya...) así como el asesoramiento para superar las entrevistas y controles policiales y judiciales que se hacen para valorar la veracidad del vínculo.

Lista de personas para aparejar con los clientes de la banda criminal

Disponían de una bolsa de ciudadanos con pasaporte europeo que estaban dispuestos a constituirse como pareja de hecho de personas en situación irregular. A cambio, los pagaban unos 3.000 euros bajo el compromiso de permanecer inscritos como pareja el tiempo suficiente para no levantar sospechas y así burlarse los controles policiales y administrativos.

La Policía Nacional ha explotado la investigación y se han detenido ocho personas, entre los líderes de la banda y también unas personas que se encargaban de captar candidatos a ser aparejados, de manera irregular, con las personas que necesitaban los papeles. A cambio, estos captadores cobraban 300 euros, y se aseguraban tener una bolsa de gente para ir ofreciéndolos a las personas que contrataban los servicios de la asesoría.